LG, el gigante tecnológico surcoreano, podría convertirse en el sucesor de Nissan en Barcelona y la compañía encargada de desarrollar la ansiada reindustrialización de la Zona Franca convirtiéndola en una fábrica de baterías para coches eléctricos.
En concreto, sería LG Chem, con sede en Seúl y filial de LG dedicada a esta labor, la que se asentaría en la factoría catalana y salvaría así entre 1.500 y 2.000 puestos de trabajo de la automovilística nipona, es decir, el 80% de los trabajadores que Nissan incluyó en el ERE y que pertenecen a la producción, según ha adelantado TV3 y ha ratificado Europa Press.
De esta forma, continuarían empleados todos los trabajadores menores de 50 años (1.548 trabajadores), y con el plan más optimista, buena parte también de los menores de 55 años (640 empleados).
En cualquier caso, por el momento el acuerdo estaría todavía lejos de cerrarse, lo que no ha evitado que la que fuese Consellera de Empresa y Conocimiento de la Generalitat hasta la semana pasada, Àngels Chacón, destituida un día antes de conocerse la noticia en favor del economista y exeurodiputado Ramon Tremosa, se haya referido en Twitter de forma esperanzadora a los rumores de reindustrialización.
"El tiempo y el trabajo persistente acaban dando frutos. ¡Ahora, a cerrar los flecos que quedan y adelante!", afirmó Chacón celebrando la plausible llegada de "un fabricante de baterías" a España.
El temps i la feina persistent acaben donant fruits. Ara, a tancar els serrells que queden i endavant! Bones notícies per moltes famílies, el nostre objectiu.
— Àngels Chacón (@angelschacon) September 4, 2020
Gràcies a tots els que fem pinya per fer-ho realitat!#FerEmpresaFerPaís pic.twitter.com/OaqhjlaoYD
Y es que LG no es la única alternativa que manejan Gobierno, Generalitat y la patronal Foment del Treball en su plan para reemplazar a Nissan. El baile de nombres para ocupar la Zona Franca arrancó con fabricante sueco de baterías para coches eléctricos que sonó como la gran esperanza y ahora continúa.
La francesa Schneider Electric también llama a la puerta
Además del gigante surcoreano, según ha confirmado el presidente de Foment del Treball en una entrevista a ACN, existe un inversor con intención de desembolsar 3.500 millones de euros para instalar una planta de baterías en la Zona Franca. Este proyecto industrial generaría 3.000 puestos de trabajo directos y otros 18.000 indirectos.
Aunque desde la entidad pública se ha rehuido por el momento revelar ningún nombre, fuentes conocedoras del proceso de reindustrialización abierto en torno a la marcha de Nissan han confirmado a El Periódico que se trata de la francesa Schneider Electric.
Sea como fuere, por el momento cualquier hipotético acuerdo está aún en una fase incipiente y, de hecho, no hay ninguna oferta formal para hacerse con la factoría.
"En el caso de que dichas propuestas se produjeran, la dirección de la compañía analizará estas opciones en la comisión de trabajo sobre reindustrialización que recientemente se ha constituido junto con las administraciones y sindicatos, siguiendo el acuerdo alcanzado a principios de agosto entre Nissan y el comité de empresa", han explicado fuentes de Nissan a Cinco Días.
Cabe recordar que las administraciones catalana y española trabajan en la búsqueda de posibles inversores industriales con el fin de mantener la actividad y el empleo en las plantas de Nissan en Barcelona, que cerrarán sus puertas en diciembre de 2021, dejando en la calle de forma directa a 2.525 trabajadores si no llega un inversor.
Pero no solo eso. De confirmarse alguno de estos proyectos, supondría además un gran paso adelante de España en materia de electrificación de coches pues se crearía la primera fábrica de baterías en nuestro país.
Hasta ahora, la producción de baterías para coches eléctricos es otra de las grandes asignaturas pendientes y, aunque ya se pretende liderar ambiciosos proyectos europeos con el País Vasco como centro neurálgico, queda todavía mucho trabajo por hacer.
Este es un campo liderado principalmente por Asia, fabricándose solo el 3% de las baterías que se producen actualmente en países europeos. Una paupérrima presencia en un modelo de negocio en auge que se está tratando de revertir con inyecciones de capital de las instituciones públicas y privadas, como el flamante acuerdo ratificado poro el Grupo PSA y Saft.
Asimismo, la instalación de esta planta en Barcelona permitiría proveer de baterías a Seat, que tiene en Martorell (Barcelona) la mayor fábrica de automóviles de España y que ha anunciado recientemente que invertirá 5.000 millones de euros entre 2020 y 2025 en nuevos proyectos de I+D para el desarrollo de vehículos en su Centro Técnico, especialmente coches eléctricos.
LG Chem ya cuenta con una fábrica en el este de Europa, en Polonia, y abastece de baterías para coches eléctricos a marcas como General Motors o Volkswagen. La idea es surtir de pilas también a Volvo y al grupo Fiat Chrysler.
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