"La furgoneta pequeña para el estilo de vida activo" Así ha presentado Mercedes-Benz la nueva Clase T, una furgoneta de tamaño compacto orientada especialmente a su utilización como vehículo familiar o recreacional.
De este modo, la recién llegada establece una importante diferencia filosófica con la Citan, su gemela destinada a la actividad comercial. A su vez, ambas comparten plataforma con la actual pareja de furgonetas de Renault, Kangoo y Express.
La Clase T se ofrece por el momento con un único tamaño de carrocería, la cual mide 4,5 m de largo por 1,86 de ancho y 1,83 de alto. Próximamente estará también disponible otra versión con mayor batalla y capacidad para siete pasajeros.
Espacio para la familia y los hobbys
Pero por si la filosofía no fuese suficiente, la estética de la Clase T también se distingue de la Citan con rasgos como las barras en el techo, la presencia de cromados en la parrilla frontal, una carta de colores con diez nuevos tonos o las llantas, que pueden ser de hasta 17 pulgadas.
En consonancia con este exterior, el interior busca crear un ambiente cercano al de las berlinas de la marca alemana. Y lo consigue empleando materiales como el cuero, la piel vuelta o el aluminio.
Las puertas correderas en los laterales brindan acceso a las plazas posteriores, cuya generosa banqueta permite montar tres asientos infantiles al mismo tiempo. Algo que, a buen seguro, agradecerán las familias numerosas.
Por detrás, la zona de carga ofrece un volumen de 520 litros, que se transforman en 2.127 litros al abatir los asientos posteriores. Un borde de carga bajo (56,1 cm) favorece el traslado de bultos pesados.
Esta habitabilidad viene complementada por un nutrido equipamiento de seguridad que comprende un total de siete airbags, incluyendo uno central que se despliega en el espacio entre los dos asientos delanteros.
Por lo demás, el Clase T cuenta también con múltiples asistentes activos: frenada activa de emergencia, ayuda de arranque en pendiente, asistente de viento cruzado, detector de fatiga y atención, ayuda de mantenimiento del carril y limitador de velocidad.
En lo referente a conectividad, el sistema multimedia MBUX se controla desde la pantalla táctil de siete pulgadas situada en el salpicadero. La conocida 'suite' de Mercedes-Benz está actualizada a su última versión y ofrece, en opción, tanto un navegador integrado como su potente asistente virtual dotado de inteligencia artificial.
Dos diésel, dos gasolina y más tarde, el EQT
En el apartado mecánico el escalón de acceso en diésel lo conforma el T 160 d, que con 1,5 litros de cubicaje y cuatro cilindros entrega 95 CV de potencia. Por encima está disponible el T 180 d, una variante del anterior pero con 116 CV.
Si queremos gasolina nuestras opciones arrancan en el T 160, cuyo propulsor de 1,3 litros de cilindrada aporta 102 CV de potencia. De igual modo, si priorizamos las prestaciones deberemos acudir al T 180, que con sus 131 CV es el motor más potente de la gama.
Todas estas motorizaciones cuentan de serie con una transmisión manual de seis velocidades si bien los T 160 d, T 180 d y T 180 pueden combinarse en opción con una caja automática de doble embrague y siete relaciones.
Por otro lado, y coherentemente con la estrategia de electrificación que está siguiendo Mercedes-Benz, la Clase T tendrá una variante eléctrica. Se llama EQT y, aunque la marca no ha querido dar nuevos detalles, sí ha dejado caer que sabremos más de ella dentro de poco.
La gama de la Clase T se articula en torno a tres líneas base de equipamiento, denominadas (de menor a mayor dotación) 'Base', 'Style' y 'Progressive'. Cada una de ellas incluye detalles estéticos propios en el tapizado y los guarnecidos, además de paquetes de opciones específicos mediante los cuales podremos añadir faros led, cámara de visión trasera o un sistema de iluminación ambiental con ocho colores a elegir.
