Agitada primera sesión de entrenamientos libres en el Gran Premio de Malasia. El coche de Kevin Magnussen estallaba en llamas al poco de ponerse el cronómetro en marcha y los comisarios tenían que intervenir para apagar el monoplaza.
Menudo susto se ha llevado Kevin Magnussen con su Renault en Sepang. El piloto de Renault se dirigía al box tras la vuelta de instalación cuando desde el equipo se le instaba a salir del coche que estallaba en llamas. El piloto danés saltaba literalmente del coche para escapar del Renault que se resistía a apagarse.
Los comisarios tiraban de extintor para tratar de apagar el incendio antes de tener que lamentar males mayores pero la gasolina que salía del depósito no se lo ponía nada fácil. Finalmente el incidente se saldaba sin males mayores que un impresionante trabajo por delante para los mecánicos del equipo francés.
Magnussen leaps to safety in pit lane fire drama https://t.co/O1h7YsZfKM pic.twitter.com/nLHy1I20DK
— FRANCE 24 (@FRANCE24) 30 de septiembre de 2016
Trabajo, que por cierto, han realizado con éxito para que Magnussen llegara a tiempo a la segunda sesión de entrenamientos libres.
La pregunta que muchos se hacían, ante la dantesca imagen del coche en llamas es si el piloto hubiese podido salir de la misma forma si hubiese llevado instalado el famoso halo.
Siempre hace calor en Malasia... A veces más de la cuenta. Magnussen en llamas. #F1 pic.twitter.com/7JUT6aBHcD
— MrAlexF1 (@MrAlexF1) 30 de septiembre de 2016
