Si no puedes comprar tu propio Lamborghini Aventador, siempre puedes imprimirlo en 3D: la loca historia detrás de esta réplica

Si no puedes comprar tu propio Lamborghini Aventador, siempre puedes imprimirlo en 3D: la loca historia detrás de esta réplica
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Hace casi cinco años que Sterling Backus y su hijo Xander, de Erie (Colorado, EE.UU.), estaban echando una partida al Forza Horizon 3 a los mandos de su coche preferido, un Lamborghini Aventador, cuando Xander preguntó a su padre: "¿Podríamos construir uno de estos?". Sterling no dudó en complacer a su hijo y, de paso, cumplir su sueño de tener un superdeportivo.

Backus, que es físico en la Universidad de Colorado, tuvo una idea tan loca como brillante: comprar una impresora 3D para hacer una réplica del precioso Lamborghini Aventador SV. Y padre e hijo (con la ayuda del resto de la familia) se pusieron manos a la obra con el proyecto, que hoy están a punto de terminar con la ayuda de la propia Lamborghini.

Un orgullo para Sant'Agata Bolognese

Como explica el propio Sterling Backus en una entrevista con '3D Printing Nerd', el proyecto se ha construido desde cero, “sin chasis, sin motor, sin nada”. Ni siquiera tenía mucha idea sobre impresión en 3D, pero se compró una pequeña CR-10S en Amazon y se puso manos a la obra con un intensivo de tutoriales de YouTube, aprendiendo todo lo que necesitaba saber.

Este autodidacta con una determinación fascinante y el ayudante más feliz del mundo, empezó por descargar de Internet el modelo de un Lamborghini Aventador a escala 1:10, y poco a poco fue ajustando cada pieza a su tamaño real para irlas imprimiendo y montando en el garaje.

E incluso ha ido añadiendo algunas modificaciones, como ensanchar sutilmente la carrocería.

Lambo 1

El equipo padre e hijo, además de pasar un tiempo de calidad impagable con este rocambolesco proyecto, nunca se ha rendido pese a los desafíos que han ido encontrando por el camino. “Tuvimos nuestra CR-10S funcionando durante más de un año casi sin parar”, dijo Backus.

Con este modelo de impresora, pensado para proyectos más pequeños, hacían piezas pequeñas (de unos 30 cm³), y luego las iban uniendo en un solo panel. El proceso se ha ido documentando en el propio canal de YouTube de Backus, 'Lasersterling'.

Aper Lambo

Teniendo en cuenta el caluroso clima de Colorado, Backus ha utilizado materiales como la fibra de carbono para reforzar algunos componentes. Además, tuvo que montar un armazón metálico a medida para encajar todas las piezas impresas en 3D y reforzar la durabilidad de la estructura.

Aunque el proceso de construcción ha planteado muchos y muy distintos desafíos en estos cinco años, Backus admite que lo más difícil ha sido fabricar las características puertas de tijera. Sin embargo, consiguió construirlas de forma que no sólo tuvieran un aspecto impresionante, sino que también fueran totalmente funcionales.

Lambo Printed

Bajo el capó, un motor de un Chevrolet Corvette de 2005 encontrado en un desguace, reconstruido y ajustado para adaptarlo a las necesidades de los Backus, da vida a este proyecto único.

Hace tiempo que Lamborghini se enteró de este proyecto y desde la fábrica de sueños que es Sant'Agata Bolognese no solo han reconocido el extraordinario trabajo de estos apasionados de la firma italiana, sino que han querido aportar su granito de arena para hacerlo realidad.

Un sueño hecho realidad

Hace ya dos años, por Navidad, la marca no solo les prestó un auténtico Lamborghini Aventador durante dos semanas para que pudieran disfrutar de él al máximo, sino que también les envió un volante y faros originales del modelo que les hicieron inmensamente felices.

“Estos faros normalmente cuestan unos 5.000 dólares la pieza”, explica Sterling. “Yo no podía permitírmelos, pero a Lamborghini le gustó tanto el proyecto que me los donó”. Lo mismo sucedió con el volante, que sustituyó de inmediato al de Audi que había montado Backus en su réplica impresa.

Interior

A modo de curiosidad, precisamente el volante es el único componente del coche con la insignia de la marca, “como muestra de respeto a la firma”, dice Backus. Padre e hijo también han recibido la pintura que necesitaban para poner a su réplica el broche de oro.

Solo queda hacer algunos ajustes a la mecánica y los componentes eléctricos del coche para que por fin todo esté listo y los Backus puedan disfrutar de su proyecto soñado. Además, lo expondrán al mundo en el Bandimere Speedway (Colorado, EEUU) el próximo mes de agosto.

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