Después del análisis dinámico del BMW Serie 1 M Coupé, llega el momento de analizar si todo ese carácter deportivo del que hace gala cuando se le aprieta, también tiene cierto nivel de raciocinio en cuanto a equipamiento, versiones y precio.
Uno de los primeros puntos que debemos tener en cuenta, es que el BMW Serie 1 M Coupé ha sido concebido como el modelo más económico jamás creado por M GmbH. Y para ello, su precio debía estar considerablemente por debajo del resto de sus hermanos de departamento.
El objetivo era bajar los 78.400 euros que cuesta el BMW M3 Coupé, el que hasta la llegada del BMW Serie 1 M Coupé era el modelo más económico de M. Y han conseguido ponerlo en el mercado con un precio de 56.500 euros. ¿Os parece caro? No olvidéis que el BMW 135i Coupé cuesta 48.528 euros. Veamos como lo han conseguido.
La clave se ha basado en la sencillez. No han equipado al BMW Serie 1 M Coupé con ningún elemento que no considerasen absolutamente imprescindible para su objetivo, ser eficaz en conducción deportiva. Pero tampoco han prescindido de cosas como la tapicería de cuero.
Así, una de las primeras cosas que me llamaron la atención cuando comecé a tener información de éste coche, fue que equipase un cambio manual de seis velocidades. Su mayor rival, el Audi RS3 Sportback llega al mercado por 55.900 euros, un precio algo más ajustado que el del BMW. Y además incorpora una caja de cambios automática secuencial de doble embrague S-Tronic de siete velocidades, frente a la manual de seis del BMW.
Sin haber probado el Audi RS3 Sportback con su caja de cambios S-Tronic, que seguro que funciona a las mil maravillas, tengo que decir que el cambio del BMW es uno de los mejores que he probado en los últimos años. Las marchas están perfectamente escalonadas, y permite insertar una u otra marca sin apenas esfuerzo. No eché de menos un cambio automático-secuencial.
Por otro lado, el BMW Serie 1 M Coupé solo está disponible en tres colores: blanco, negro o naranja. Por el único que no hay que pagar sobreprecio, es por el blanco, ya que por los otros dos tendremos que desembolsar 784 euros.
Las llantas de 19 pulgadas son de serie, y aparte de la línea cromada que recorre el marco de las ventanillas sin sobreprecio, no se puede elegir nada más para personalizar el aspecto exterior del coche. Sencillez total en las opciones, al menos en el equipamiento exterior.
Equipamiento interior del BMW Serie 1 M Coupé
En el equipamiento interior, destaca de serie la tapicería de cuero como parte del equipamiento de serie. Éste lleva los pespuntes en color naranja, para destacar sobre el color negro de la tapicería. En el caso de nuestra unidad de pruebas, ese color combinaba a la perfección con el color exterior, pero si optas por el color de carrocería negro o blanco, los pespuntes también irán en naranja.
Otro de los elementos de serie es el tapizado en alcántara de algunas molduras. Por ejemplo, la franja que recorre el salpicadero de izquierda a derecha está forrada en alcántara con pespunte naranja. Lo mismo en las molduras de las puertas, y en otros detalles como el la bolsa del poco de cambio o el panel que recubre los relojes.
Sinceramente, en un coche así de deportivo yo le hubiese forrado el volante también en alcántara, igual que el ya mítico BMW M3 CSL (E46). No está disponible así ni en opción, así que el que quiera ponerle la guinda al interior, tendrá que recurrir a un buen tapicero que elimine el cuero del volante y ponga alcántara con las costuras con los tres colores típicos de BMW M GmbH.
Entre el equipamiento de serie, también hay que destacar el control de velocidad de crucero, que en otros modelos BMW se paga aparte. El volante multifunción, el climatizador y los faros de xenón también forman parte del equipamiento de serie.
Opciones caras en el BMW Serie 1 M Coupé
Como es habitual en los coches de pruebas, el equipamiento opcional era bastante elevado. Ya hemos nombrado el equipo de sonido Harman-Kardon, que por 1.302 euros puede llegar a hacer que en algunos momentos prefieras escuchar tu música favorita a todo volumen antes que el precioso sonido de los escapes.
Por otro lado, el reglaje eléctrico de los asientos deportivos también se paga aparte, y no es precisamente barato. El precio es de 1.565 euros, lo cual me parece bastante exagerado si tenemos en cuenta que cuando un coche tiene un conductor habitual, no suele ser necesario modificar muy a menudo la posición de conducción.
En el lateral derecho de la consola central que divide ambos asientos, se puede colocar de forma opcional un soporte para bebidas con un sobreprecio de 50 euros. El mayor problema de este es que no tiene dónde guardarse cuando está desmontado, y aparte no me parece muy lógico tener que pagar por algo así.
Otro extra que es bastante recomendable, son los sensores de aparcamiento traseros. El precio es de 563 euros. Por otro lado el sensor de lluvia que incluye accionamiento automático de las luces de cruce cuesta 164 euros.
Y como es habitual en estas marcas, el navegador por satélite que preside el salpicadero con la pantalla en color tiene también un sobreprecio exagerado, cuesta 2.666 euros.
En definitiva, podemos decir que el equipamiento de serie del BMW Serie 1 M Coupé está bastante acorde con el precio del vehículo, pero también hay que tener en cuenta que si queremos equiparlo con algún elemento opcional, debemos ir preparando la cartera.
Seguridad ante todo
Cuando llevas 340 caballos de potencia bajo el pie derecho, es importante tener siempre la caballería bajo control. Uno de los elementos que permiten mantener el control del coche en todo momento, es el diferencial M de bloqueo variable. Básicamente, este sistema detecta cuando una de las dos ruedas del eje posterior gira más rápido que la otra, para aplicar fuerza a la rueda con más tracción. De ahí esas derrapadas controladas con las que tanto he disfrutado.
Otro factor clave son los frenos, y en este sentido me ha gustado. BMW dice que los discos, de 360 milímetros los delanteros y 350 milímetros los traseros, son de un material compuesto que mejora su funcionamiento respecto al de otros BMW M. Lo cierto es que en ningún momento han dado síntomas de fatiga, algo que si que ocurre con los BMW M3.
La dirección Servotronic cambia su nivel de asistencia y lo directo de su funcionamiento dependiendo de la velocidad a la que rodemos. Por otro lado el DSC (Dynamic Stability Control) del BMW Serie 1 M Coupé incluye control de estabilidad (ASC), el control dinámico de los frenos (DBC) o el asistente para arrancar cuesta entre otros.
Pero en el caso del BMW Serie 1 M Coupé, es casi más importante que todos estos la asistencia de frenado en curvas (Cornering Brake Control, CBC), ya que con tanta caballería no es extraño llegar demasiado rápido a una curva, y tener que alargar la frenada hasta que ya estás con el volante girado. Este sistema, te permite hacerlo con total seguridad. Ya lo querían para si muchos coches de carreras.
Y si queremos bajar a los detalles, por ejemplo las pastillas de frenos detectan cuando los discos están mojados, y se acercan de forma leve a los discos para secarlos y que estén mejor preparados para las frenadas realmente necesarias. ¿Alguien duda que es un coche seguro?
Pues si todavía tenéis dudas, podríamos hablar de equipamiento de serie como airbags frontales, torácicos y para las caderas, airbags laterales tipo cortina, cinturones de seguridad con tensores y limitadores de fuerza para los cinturones de los asientos delanteros. Pero sinceramente creo que el comprador de un BMW Serie 1 M Coupé da más importancia a las prestaciones y la forma (segura) de conseguirlas, que a otros elementos de seguridad pasiva como estos últimos.
Y si alguien sigue con dudas, le animo a leer esta tercera parte de la prueba del BMW 120i 5p que publicamos hace ya cuatro años dónde se habla de los resultados del BMW Serie 1 en las pruebas EuroNCAP.
Continuará...