Ahora que los precios del combustible empezaban a relajarse, tenemos que volver a dar una mala noticia. Desde la prensa económica se habla de un inminente aumento de los impuestos que pagan los combustibles para resolver el déficit tarifario con las eléctricas. No está aprobado todavía.
Se trata de añadir una nueva tasa a la gasolina de 4,6 céntimos por litro y para el gasóleo 5,3 céntimos por litro. Si hacemos un repostaje de 50 litros, supondría pagar 2,3 euros más si es gasolina ó 2,65 euros más si es gasóleo. Se baraja el nombre de “céntimo verde”.
El objetivo es terminar con la diferencia de lo que las empresas eléctricas —dicen— cuesta generar la electricidad y lo que ingresan a cambio, y que en 2013 no exista dicho déficit. El combustible ahora soporta el impuesto de hidrocarburos (IEH), los céntimos “sanitarios” (IVMDH) y el IVA, casi la mitad del precio.
Más impuestos al combustible, los existentes ¿no son suficientes?
Según la Asociación de Operadores Petrolíferos, así se compuso el precio del combustible en mayo, 47,42% en impuestos para gasolina sin plomo 95 y 42% para el gasóleo. De momento seguimos siendo uno de los países europeos que menos impuestos clava recauda con los combustibles de automoción.
Desde 2008 ha aumentado la carga impositiva de la gasolina en un 18%, y el gasóleo ha subido un 20%. En 2009 se subieron los IEH (2,9 céntimos/litro) y en 2010 se aumentó el IVA del 16 al 18%. Además, el IVMDH ha subido en la mayoría de las CCAA porque sus arcas están llenas de telarañas, y el bolsillo del automovilista parece interminable.
Por otro lado, la AOP también señala que desde 2008 ha bajado el consumo de gasolina un 18%, y el gasóleo ha bajado un 12%. No existe una correlación directa entre ambas variables porque hay que considerar más cosas: aumento del paro, menor actividad económica, menos desplazamientos, etc.
Si esta subida, que está en estudio, es finalmente aprobada, nos aproximaremos a la barrera psicológica de 50% de impuestos por litro. Es decir. Si repostamos 50 litros, el coche por sí solito no aprovechará más de 15 litros en producir movimiento útil, el resto se perderá en calor y rozamientos.
Una cosa es la física, que sí, duele, y otra la política impositiva. Llenar 50 litros cuesta unos 70 euros, y de esa cantidad, la mitad son impuestos. La AOP señala que pagamos cinco veces más impuestos en los combustibles fósiles que en la electricidad (basada a su vez, en reducida medida, en energías fósiles).
Cada día me alegro más de haberme pasado al GLP, combustible que no queda afectado por esta medida al tener los impuestos congelados hasta 2018 por mandato de la UE. Esta vez no le podemos echar la culpa a la cotización del dólar/euro ni al precio del barril, solo a la Administración.
No hace falta ser adivino, cuanto más sube el combustible, menos se utiliza el coche, y el consumo de carburante ha bajado a niveles de hace varios años, cuando había muchos menos coches en el parque automovilístico, ese que está envejeciendo y que dentro de poco tendrá más de la mitad de los coches con más de 10 años.
Las gasolineras también lo sufren, especialmente las que compiten en precio, porque venden menos, y esta medida no les beneficia. Tampoco anima al consumidor a pasarse al coche eléctrico, porque sigue habiendo una falta evidente de infraestructura de apoyo y de coches a precios que el español medio esté dispuesto a pagar o se lo financien.
Está subiendo todo: el combustible, el transporte público, la electricidad… parece que no hay escapatoria ante tanta y tanta subida. Todavía no se ha concretado este aumento, pero igual el mismísimo viernes (Consejo de Ministros) tenemos la mala nueva, en la que pensaremos hasta el próximo partido de la Selección.
A este ritmo, dentro de poco no serán necesarios los límites de velocidad, ni los radares, ya se preocuparán los conductores de cuidad su economía aunque las señales le dejen ir más deprisa. Como coincida esta subida con el hipotético aumento de 10 km/h de límite en autopistas y autovías, empezaré a ser un malpensado.
Fuente | El Economista, AOP
En Motorpasión | Guía para entender los precios de los combustibles, ¿Qué es el céntimo sanitario y dónde se cobra?