Que el Campeonato del Mundo de Rallyes está pasando por un momento de popularidad muy bajo en comparación con su historia es algo más que evidente, pero ahora podría estar empezando a cambiar. Kalle Rovanperä, el nuevo niño prodigio de Toyota, va camino de su primer título, es un fenómeno de masas y pronto podría tener buena compañía.
El WRC lleva unos años siendo coto privado de Hyundai y Toyota, pero la irrupción de Ford con su Puma cada vez va a más. El equipo M-Sport que sustenta a la marca americana estaría pensando en una completa revolución que podría suponer un terremoto en el mundial y relanzar la popularidad del campeonato.
Ford tantea una vuelta de Loeb mientras habla con Tänak y Evans
Malcolm Wilson, el líder del proyecto de M-Sport y Ford, estaría dispuesto a tirar la casa por la ventaja para tener a Sébastien Loeb de vuelta al mundial. El piloto más laureado de la historia del WRC ya está ligado a Ford, y participa en algún rally puntual, pero ahora Wilson quiere que vuelva a tiempo completo a sus 50 años.
Loeb acaba contrato con Prodrive después del Dakar de 2023, por lo que sería libre para participar en la temporada del WRC a tiempo completo. Como mínimo, Ford querría conseguir que el francés se implicase con un programa mucho más amplio que el actual, cubriendo al menos tres cuartos del campeonato.
No es el único golpe de efecto que estaría preparando Ford. M-Sport también habría hablado con Elfyn Evans y Ott Tänak para una incorporación la próxima temporada. En el caso del estonio, campeón del mundo de 2019, aún tiene contrato con Hyundai para 2023, pero la relación entre ambas partes está muy tensa.
Tänak reprocha a Hyundai que siguen sin apostar contundentemente por él, y como prueba está el pasado Rally de Grecia, donde Hyundai dejó ganar a Thierry Neuville por delante de Tänak pese a que es el estonio quien aún tiene alguna opción de título. Además, Tänak no está nada satisfecho con la fiabilidad del coche. Podría haber ruptura antes de tiempo.
En cuanto a Evans, sabe que en Toyota no tiene ningún futuro, ya que Kalle Rovanperä va a ser el rey absoluto de la marca en los próximos años. El británico, dos veces subcampeón del mundo, ha hablado con Ford, pero también podría acabar en Hyundai si finalmente Tänak sale antes de tiempo.
A pleasure to have @SebOgier back behind the wheel of the #GRYaris Rally1 HYBRID today ahead of his return to action at Rally New Zealand! 🙌#ToyotaGAZOORacing #WRC pic.twitter.com/EmCIutBLB4
— TOYOTA GAZOO Racing WRT (@TGR_WRC) September 15, 2022
Y es que el golpe de efecto definitivo para terminar de relanzar el mundial de rallyes sería el regreso de Sébastien Ogier. El octocampeón mundial se retiró la temporada pasada y este año está con un escueto programa en Toyota. Quería pasarse a la resistencia, pero allí no le está yendo especialmente bien.
Los rumores del WRC hablan de que Jari-Matti Latvala estaría moviéndose para conseguir que Ogier regresase a tiempo completo al mundial con Toyota, o al menos con un programa mucho más amplio que el actual que cubriese casi el 75% del campeonato. Qué mejor forma de reemplazar una posible pérdida de Ogier.
Veremos cuántos de estos movimientos terminan por cuajar, pero un WRC con Loeb, Ogier, Rovanperä y Tänak, los últimos cuatro campeones, luchando por el título en marcas diferentes solo podría traer una nueva era dorada de los rallyes.
