El legado de Carlos Sainz, a través de tres décadas de automovilismo español
El automovilismo español ha vivido en las tres últimas décadas sus mejores momentos. Durante este tiempo, los pilotos de nuestro país han conseguido deslumbrar y hacerse con Campeonatos del Mundo que tiempo atrás hubiesen parecido fuera de nuestro alcance. Los telediarios han abierto con imágenes de rallys, de carreras de Fórmula 1 y, sobre todo, con victorias de españoles.
Nombres como Fernando Alonso o Carlos Sainz se han hecho hueco en las portadas de periódicos, revistas, páginas web... Han sido los mejores embajadores de nuestro país de unas competiciones con un público muy reducido hasta su llegada. El trabajo ha dado su recompensa… y ahora se trabaja para seguir en la cresta de la ola tanto en monoplazas como en rallys, asunto que nos ocupa en este artículo.
El Campeonato del Mundo de Rallys se puso en marcha en el año 1973 después de que la FIA decidiese unir los Campeonatos del Mundo de Marcas y el Campeonato de Europa de Rallys. La temporada inaugural contó con nueve pruebas que inauguraban el Rally de Montecarlo. En aquella carrera ya hubo dos españoles, el gallego Estanislao Reverter, a los mandos de un Mini 1275 GT, y Salvador Servià con un SEAT 127. Ambos tuvieron que abandonar, pero comenzaron a mostrar la bandera española en los recién estrenados tramos mundialistas de la FIA.
No fue hasta el Rally de Portugal de 1975 cuando un español logró acabar un rally del mundial. Su nombre: Fernando Lezama. Lo consiguió a los mandos de un Ford Escort RS 1600, que finalizó en la novena posición. No puntuó a pesar de su resultado, pues hasta 1977 no se puso en marcha el Campeonato del Mundo de pilotos. El primer piloto en lograr un punto con bandera española en su coche fue Salvador Servià, noveno en el Rally de Montecarlo de 1980 con un Ford Fiesta 1600.
Tres años antes, en 1977, Antonio Zanini consiguió el primer podio de un piloto español en el Mundial de Rallys -cuando aún no había Campeonato de Pilotos, como explicabamos anteriormente-. Fue en el histórico Rally de Montecarlo para el automovilismo español: Zanini fue tercero, Salvador Cañellas acabó cuarto y Servià séptimo.
El hito de "El Matador"
Todos estos resultados los pulverizó un madrileño llamado Carlos Sainz, que debutó en el WRC en 1987, con tan sólo 25 años, diversas victorias y dos Subcampeonatos de España a sus espaldas. Ya en su debut logró siete puntos gracias al séptimo y octavo puesto logrados en los rallys de Francia y Gran Bretaña con un Ford Sierra RS Cosworth. En 1989, ya con Toyota, participó en siete rallys, de los que tres acabó en el podio, logrando en Gran Bretaña un segundo puesto, mejor resultado hasta ese momento para un piloto de nuestro país. Sainz solo acababa de irrumpir en el WRC y no solo eso, en estos dos años se proclamó Campeón de España de Rallys.
En 1990 llegó el gran año para el español. A los mandos del legendario y tan recordado Toyota Celica logró su primera victoria mundialista, en el Rally de Grecia. Aquella temporada se subió a lo más alto del podio en tres ocasiones más que le dieron su primer Campeonato Mundial de Rallys, algo que hasta entonces parecía algo inalcanzable para los españoles, ante el dominio de pilotos nórdicos como Vatanen, Mikkola, Blomqvist, Salonen o Kankkunen.
Dos años más tarde, en 1992, Carlos repitió triunfo y siguió a un altísimo nivel, compitiendo para marcas como Lancia, Subaru, Ford, Toyota o Citroën hasta su retirada oficial del Mundial en 2004.
A lo largo de su carrera en el Mundial de Rallys, Sainz logró 26 victorias, récord de 196 participaciones en pruebas del Campeonato del Mundo - aún a día de hoy sigue siendo el piloto que en más rallys del WRC ha participado -97 podios y 756 victorias de etapa-. Aunque parezca mentira, a sus 55 años, sigue activo con su participación anual en el Dakar en donde ya ha ganado en dos ocasiones.
Carlos marcó solo el inicio de una etapa victoriosa en el Mundial de Rallys para nuestro país, donde muchos jóvenes han peleado desde los años 90 para llegar a donde llegó “El Matador”. Los rallys crecieron en popularidad con un piloto como él en lo más alto y las listas de inscritos crecieron en las pruebas nacionales que se disputaban – y disputan – en nuestro territorio.
Puras y Sordo, los otros vencedores en el WRC
España cuenta con 28 victorias en la historia del Campeonato del Mundo de Rallys. Ya hemos dicho que Carlos Sainz cuenta con 26. Las otras dos pertenecen a los cántabros Jesús “Chus” Puras y a Dani Sordo.
Ocho veces Campeón de España de Rallys, Puras logró su primer y único triunfo en el Mundial en Rally de Córcega de 2001 a los mandos de un Citroén Xsara WRC, junto a Marc Martí. Nueve años más tarde, con un Citroën DS3 WRC junto a Carlos del Barrio, Dani Sordo (Campeón de España en 2005) conseguía otra victoria más para España en el Rally de Alemania.
Sordo, que fue considerado en un momento el digno sucesor de Carlos Sainz, sigue en activo a día de hoy, compitiendo con un Hyundai i20 WRC. En lo que llevamos de temporada, su tercera con la marca surcoreana, Sordo ha logrado dos sextos y dos cuartos puestos y es uno de los aspirantes a la victoria en los rallys que restan de la igualadísima temporada que se está viviendo en el WRC 2017, en la que han ganado cuatro marcas diferentes -Ford, Toyota, Citroën y Hyundai, en ese orden-, en las cuatro pruebas disputadas hasta el momento.
Dani es el presente en el Mundial, pero en España también hay una enorme ‘cantera’ que da – y dará – mucho que hablar. En 2016 vimos a Cristian García y a Rebeca Liso alzarse con el título del Campeonato de España de Rallys de Asfalto (CERA) con un Mitsubishi Lancer EVO y a Álex Villanueva y Óscar Sánchez hacer lo propio en el Campeonato de España de Rallys de Tierra (CERT).
Antes de ganar, hay que llegar
Llegar a ser piloto de competición no es nada fácil hoy en día. Conseguir el capital necesario para disputar cada temporada es uno de los mayores quebraderos de cabeza para las jóvenes promesas. La figura de los patrocinadores ha cambiado mucho desde los tiempos de Sainz. Ya no hay tantas marcas dispuestas a poner una pegatina en los coches y las que lo están, no pueden pagar las estratosféricas cantidades que se aportaban en el pasado.
Cierto es que hay ciertas iniciativas que ayudan a los mejores a luchar por su sueño. La Real Federación Española de Automovilismo (RFEdA), por ejemplo, ha puesto este año en marcha la Beca Junior R2, que premia al mejor piloto de tres pruebas del CERA y tres del CERT con un programa júnior en el Campeonato de Europa de Rallys.
Cristian García, de quien os hablábamos anteriormente, fue el ganador de la Beka RMC 2014, puesta en marcha por el preparador RMC y que daba la oportunidad al vencedor de dar el salto a un campeonato nacional a los mandos de un coche de RMC de la categoría R5.
Academia Peugeot, apadrinada por Carlos
Confiando en el producto nacional y apoyados en Carlos Sainz, padrino del proyecto, Peugeot puso en marcha en 2015 la Peugeot Rally Academy, una plataforma perfecta que da las oportunidades que se merecen a algunos de los mejores pilotos del panorama nacional.
José Antonio Suárez y Pepe López fueron seleccionados en esa primera temporada para participar con el Peugeot España Racing Team a los mandos del Peugeot 208 R2 en la copa francesa 208 rally cup. No defraudaron, y Suárez se hizo con el título en 2015.
López siguió sus pasos e hizo lo propio un año más tarde. En 2017 ambos participan en el Campeonato de Europa de Rallys subidos a un Peugeot 208 T16 con el objetivo de seguir sumando victorias y demostrando a Peugeot que merecen un puesto en lo más alto de los rallys.
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