Nissan Pulsar 2016: así son sus novedades para adaptarse a la Euro6
Tras demostrarnos con los Qashqai, Juke y X-Trail que nadie como ellos sabe poner en el mercado SUV de éxito que se convierten en superventas nada más llegar al mercado, en Nissan han querido aplicar la misma jugada maestra al Nissan Pulsar, su primer compacto desde el viejo Almera que comenzó a venderse hace exactamente un año.
Este tiempo le ha servido para hacerse con una cuota de mercado discreta en el competido segmento compacto. Ahora el Nissan Pulsar recibe modificaciones en los motores para adpatarse a la normativa Euro6 y una serie de novedades para tratar de relanzarlo en busca del éxito comercial que todavía no ha afianzado. Hemos acudido a su presentación y te contamos qué novedades incorpora.
Lo primero que debemos aclarar, es que entre este Nissan Pulsar y el que se presentó en septiembre de 2014 no vas a notar ninguna evolución en el apartado de diseño. El coche sigue siendo exactamente el mismo, un compacto de cinco puertas que hereda algunos rasgos de sus hermanos SUV.
Desarrollado íntegramente en España, no estamos ante el compacto más atractivo del mercado, ni tampoco pretende serlo. Su posicionamiento es otro, busca más la practicidad que el factor emocional, tal y como nos contó también Javier Álvarez en la primera toma de contacto con este modelo.
El Nissan Pulsar es un coche muy español. Desarrollado en el Centro Técnico Europeo de Nissan (NTCE) situado en la Zona Franca de Barcelona, el Pulsar también incorpora motores producidos en Valladolid o cajas de cambios montadas en Sevilla
Los cambios se esconden bajo el capó, en los motores, que ahora han recibido pequeñas modificaciones para adaptarlos a la normativa Euro6. Básicamente, por contarlo de forma muy resumida, la normativa Euro6 obliga a la disminución de los óxidos de nitrógeno, gases habitualmente generados en procesos de combustión con alta presencia de oxígeno. Desde la primera regulación europea hasta ahora, las normas han establecido una reducción de un 98 por ciento sobre los valores de NOx emitido.
Este gas está más presente en los gases de escape de los Diesel que en los gasolina, pues aquellos trabajan con exceso de aire y parte del oxígeno queda libre tras la combustión. Los óxidos de nitrógeno liberados (NO y NO2, fundamentalmente), al interaccionar con el agua de la atmósfera, son los principales responsables de la lluvia ácida, con consecuencias nocivas para el entorno al acidificar los acuíferos, favorecer la toxicidad de las aguas, robar nutrientes esenciales al suelo o dañar las hojas de los árboles.
Así que veamos qué tienen los tres motores disponibles antes de hacer un breve recorrido al volante de la versión de 190 caballos.
1.5 dCi de 110 CV
El 1.5 dCi de 110 CV de la sexta generación de la Alianza Nissan-Renault, debería ser el motor más vendido en la gama Pulsar en España, pero sorprendentemente se venden más Pulsar de gasolina que diesel.
En el han bajado un 10 por ciento las emisiones de CO2 y su consumo a pesar del incremento de 20 Nm del par máximo respecto a su predecesor. Tiene 260 Nm y están disponibles desde las 1.750 hasta las 2.500 rpm.
Para conseguirlo, han tenido que incorporar un sistema de recirculación de gases (EGR, Exhaust Gas Recirculation) de baja presión. El sistema start/stop, el de regeneración de energía de frenadas y deceleraciones o el nuevo turbocompresor de geometría variable capaz de ofrecer más par a menos revoluciones son sus novedades principales.
Siempre ligado a una caja de cambios manual de seis velocidades, homologa un consumo de 3,6 l/100 km con 94 g/km de CO2.
1.2 DIG-T de 115 CV
Pasando a los motores de gasolina, el más bajo es el 1.2 DIG-T de 115 CV. Se trata de un cuatro cilindros con bloque de aluminio dotado de distribución variable (VVT).
En combinación con un colector integrado del turbocompresor, este motor asegura mucho par desde muy bajo régimen y a lo largo de una amplia banda de revoluciones.
Entrega el par máximo de 190 Nm a a 2.000 rpm y se mantiene por encima del 95 por ciento hasta alcanzar casi las 4.500 rpm donde entrega los 115 CV, estables hasta las 5.000 RPM.
Este motor en el Nissan Pulsar homologa 5,0 l/100 km y unas emisiones de CO2 de 117 g/km. Se puede combinar con caja de cambios manual de seis velocidades o una automática X-Tronic de la que os contaré cositas en breve.
1.6 DIG-T de 190 CV
Es el motor más potente de la gama Pulsar, y lo comparte con algunas modificaciones con otros modelos de la marca como el Qashqai y el Juke. Desde su lanzamiento, este 1.6 sobrealimentado cumple con la norma de emisiones Euro6, para lo que también dispone de una válvula de recirculación de gases (EGR) refrigerada o un sistema Stop/Start, encargado de apagar el motor cuando el coche se detiene y de rearrancarlo automáticamente para reiniciar la marcha.
Con una potencia de 190 CV a 5.600 rpm, permite acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 7,7 segundos y los consumos medios se quedan en 5,9 l/100 km. Dicen que es uno de los coches cercano a los 200 caballos que menos consume del mercado, aunque también os aseguro que a pesar de la potencia no es precisamente un deportivo.
Caja de cambios XTRONIC mejorada
La caja de cambios automática se ha renovado para reducir su tamaño un 10% y su peso un 13 por ciento. Las fricciones internas se reducen en hasta un 30 por ciento, al ofrecer menos superficie sumergida en el lubricante durante su funcionamiento.
Esta caja de cambios cuenta con tres modos de funcionamiento: directo, directo deportivo y manual, este último permite meter las marcas mediante movimientos longitudinales de la palanca selectora, nada de levas.
Al volante de la versión 1.6 DIG-T de 190 CV
Tras una charla muy técnica por parte de Alejandro Miguel, Director Powertrain Nissan Europa para contarnos con todo lujo de detalles en qué consistían las modificaciones efectuadas para adaptarse a las normativas Euro6, llegaba el momento de tener una breve toma de contacto con el Nissan Pulsar.
Nos tocó llevar la versión 1.6 DIG-T de 190 caballos en una ruta rápida que nos permitió movernos por las calles del centro de Madrid, escapar un poco hacia la periferia y volver.
Era la primera vez que me ponía al volante de un Pulsar, y lo hacía precisamente tras bajarme de un Qashqai que estaba probando esos días. Lo primero que percibes son las enormes similitudes entre ambos modelos en cuanto a diseño y materiales del interior. Volante idéntico, cuadro de mandos casi idéntico. ¿Por qué arriesgar si sabes lo que funciona en un segmento muy similar?
El Nissan Pulsar es una calcamonía del SUV más exitoso de la marca japonesa, y creo que eso es un punto a su favor. Este compacto desarrollado y fabricado en España destaca por un interior con calidades más que aceptables para tratarse de un generalista.
Los plásticos que dan forma al salpicadero, el tacto de la palanca de cambios, el volante multifunción o el estar rodeado de la pantalla central de 5,8” situada en el centro del salpicadero donde se muestran las imágenes de la cámara perimetral, hacen que te sientas en un entorno agradable.
Lo mismo ocurre con la pantalla de 5” situada entre el velocímetro y el cuentarevoluciones, donde puedes manejar otros elementos como el teléfono, consultar los datos del ordenador de abordo y otros sistemas de forma bastante intuitiva.
Tras acceder al interior sin tener que sacar del bolsillo la llave, ponemos en marcha el coche pulsando un botón. El sonido del motor es bastante suave y salimos a callejear en una mañana en la que el tráfico era bastante infernal en el centro de Madrid.
Me costó bastante cogerle el tacto a un pedal de embrague un tanto blando para mi gusto, que además solo funciona en la parte alta. Por suerte este motor no es necesario subirlo mucho de vueltas para tener una respuesta más que digna, que permite moverte con soltura entre el tráfico urbano.
Cuentas con 240 Nm desde 2.000 rpm y hasta 4.000 rpm y eso permite acelerar con contundencia adelantándote al resto de rivales en cada semáforo, pero olvídate de las sensaciones deportivas porque aunque Nissan se refiera a el como un deportivo, no tengo la sensación de estar al volante de un rival digno de, por ejemplo, un Volkswagen Golf GTI.
No esperes sensaciones de coche deportivo aunque conduzcas la versión de 190 caballos. Es ágil pero no es un auténtico deportivo. ¿Esperamos a un Pulsar Nismo?
A medida que nos escapamos del tráfico urbano y empezamos a meter marchas una tras otra, el coche destaca por la suavidad más que por la adrenalina que transmite. Acelera de forma muy lineal y eso se agradece, sin apenas baches y con un tacto muy preciso de la caja de cambios manual de seis velocidades.
Una zona de curvas poco pronunciadas me sirve para confirmar lo que ya sospechaba, este coche es el más enérgico de la gama Pulsar pero no es un deportivo. Las suspensiones son demasiado blandas como para ir con el “al ataque”, así que mejor disfrutar de las otras bondades que ofrece, suavidad y buen tacto como conjunto con unas prestaciones muy dignas y unos consumos que, durante esa toma de contacto, no pasaron de los 8 l/100 km.
Un precio de acceso a la gama Nissan Pulsar reajustado
El Nissan Pulsar es un coche muy español, tal y como Nissan se encargó de recordarnos durante esta presentación. Desarrollado en el Centro Técnico Europeo de Nissan (NTCE) situado en la Zona Franca de Barcelona, el Pulsar también incorpora motores producidos en Valladolid o cajas de cambios montadas en Sevilla gracias a la alianza Nissan-Renault.
Se fabrica en Barcelona, donde comparte línea de producción con las NV200, e-NV200 y Navara y aunque a algunos no les guste, yo creo que esa apuesta por la producción española debería ser un factor importante a la hora de decantarse por uno u otro coche.
Terminamos esta toma de contacto con la gama Nissan Pulsar Euro6, destacando que la marca japonesa también ha reajustado el precio de acceso al modelo compacto. Ahora hay un Nissan Pulsar DIG-T de 115 CV con acabado Visia por 12.900 euros tras aplicar todas las ayudas disponibles hoy en día. Es un precio 1.000 euros inferior al que tenía hasta ahora.