El próximo lunes 1 de junio los conductores madrileños tendrán que volver a pagar por aparcar en las zonas de estacionamiento regulado SER: se activa de nuevo el servicio, que llevaba suspendido desde el 16 de marzo con el objetivo de facilitar la movilidad en transporte individual y evitar contagios durante la crisis sanitaria de la Covid-19.
Así lo confirmó el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante la presentación de los nuevos carriles bus de carácter provisional con los que contará Madrid y que supondrán un extra de 45 kilómetros que se sumarán a los actuales 148. Además, el propio Ayuntamiento lo avanzó en su cuenta de Twitter.
❗El próximo lunes reactivamos el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en la ciudad de #Madrid #DesescaladaMadrid #COVID__19
— Ayuntamiento Madrid (@MADRID) May 27, 2020
La suspensión de la zona SER fue aplicada por la Delegación de Movilidad y Medio Ambiente del gobierno muncipal mediante un decreto extraordinario. La misma estaría activa como mínimo hasta el 29 de marzo, pero ha sido prorrogada varias veces alargándose finalmente dos meses y medio.
Y aunque el objetivo de eliminar el pago en las zonas de estacionamiento regulado era el de permitir que los madrileños pudieran hacer uso del vehículo privado para acceder a sus puestos de trabajo como alternativa al transporte colectivo, por ser al alto foco de contagio, la disposición se levanta antes de la finalización del estado de alarma y recién entrada Madrid en Fase 1 de la desescalada.
El Ayuntamiento no se ha pronunciado sobre las zonas SER de las inmediaciones de hospitales, que fueron suspendidas antes de anularse el pago en parquímetros a nivel general. Por tanto, es de esperar que tanto las de rotación (azul) como de residentes (verde), pasen a estar activas en su totalidad el 1 de junio.
Hasta 193 kilómetros más de carriles exclusivos para autobuses
Esta decisión viene de la mano de la implementación de hasta 45 kilómetros adicionales de carriles bus que ayudarán a mejorar la frecuencia de los autobuses de la EMT madrileña y, por tanto, el número de plazas (unas 32.000 según el Ayuntamiento), a fin de de asegurar un mayor distanciamiento entre viajeros.
Esta actuación se enmarca dentro del plan de movilidad en la desescalada del Área de Medio Ambiente y Movilidad y, aunque el consistorio señala que será de aplicación temporal, también afirma que se estudiará que "una parte significativa" pase a formar parte de la red de carriles bus de forma definitiva como parte de la estrategia de movilidad sostenible Madrid 360.
En total estos carriles adicionales incrementarán en un 30 % los hasta ahora existentes, llegando a un total de 193 kilómetros. Los mismos, irán ubicados tanto dentro de la M-30 como fuera del anillo de la circunvalación, siendo de mayor extensión en esta zona.
De esta manera, en el interior de la M-30 se dispondrán un total de 8,5 kilómetros, en los barrios del exterior de la misma ascenderán a 17,8 kilómetros y en las zonas más periféricas de nuevo desarrollo, en distritos como San Blas - Canillejas y Carabanchel o las zonas residenciales de Sanchinarro y Las Tablas, se fijarán en 19 kilómetros. La suma total asciende a 44,58 kilómetros.
El Ayuntamiento señala que un total de 37 vías pertenecientes a 15 distritos de Madrid contarán con estos carriles adicionales que "se irán señalizando en las próximas semanas". El 37 % de las líneas de autobuses de la EMT, unas 79 e incluyendo los 'búhos' nocturnos, se beneficiarán de estos carriles.
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