El Fiat 124 Spider y su hermano el Abarth 124 Spider podrían no tener sucesores. La marca quiere centrarse en la familia Fiat 500, según ha indicado el CEO de Fiat, Olivier François, en declaraciones a Autocar. De hecho, son dos modelos que ya no están disponibles a la venta en el Reino Unido.
Ambos modelos están basados en el Mazda MX-5, lo cual es evidente una vez que te has subida a bordo, pues sus interiores (salvo los asientos) son idénticos al del MX-5. De hecho, los fabrica Mazda en Japón, en la misma línea de montaje que el MX-5, y la firma turinesa se limita a enviar sus motores y otros elementos específicos a los 124 Spider.
Normalmente, desarrollar un coche entres dos fabricantes permite ahorrar una inversión considerable en el desarrollo del coche. Aún así, el hecho que se fabriquen en Japón, con las fluctuaciones de la divisa japonesa y los elevados que eso supone (mano de obra de Mazda, logística) podrían ser una de las razones para que Fiat no los quiera renovar.
Sin embargo, Olivier François lo desmiente. “El mercado del 124 es un mercado de nicho. (…) Es rentable para nosotros, pero solo porque existe una joint venture. Fue una oportunidad que aprovechamos. Ganamos dinero con ello y añade un cierto factor cool”, explicó el directivo antes de añadir que no es lo que él "llamaría un auténtico Fiat, es un tipo de coche y mercado en el que Fiat no tiene ninguna legitimidad."
Sorprende su teoría cuando Fiat sí tiene legitimidad en ese segmento. Desde el 124 Spider original hasta el Fiat Barchetta, pasando por los Fiat X1/9 o 850 Spider muchos son los ejemplos en la historia de Fiat de modelos deportivos de nicho. Quizá no sean tan conocidos en algunos mercados, especialmente en el norteamericano, como lo es el MX-5, pero la marca sí goza de legitimidad en ese aspecto.
La verdadera razón habría que buscarla en la casi constante búsqueda de una nueva identidad y orientación en el seno de FCA de sus marcas italianas para que el grupo FCA o una de esas marcas sea interesante para un futuro comprador o una fusión (como casi ocurre con Renault). Y el 124 Spider es el mejor ejemplo de esos cambios bruscos de timón.
Incesantes cambios de rumbo
Originalmente iba a ser un Alfa Romeo, pero con el trabajo de desarrollo ya iniciado por Mazda se decidió que sería un Fiat y un Abarth. Luego, aunque el 124 Spider aúne lo mejor de cada casa (acabados y fabricación Mazda, motor potente en Abarth, dinamismo, etc), la política de precios de Fiat -sobre todo en el caso del Abarth- no los pone en una situación fácil en el mercado, aunque ambos modelos son rentables asegura el directivo galo.
La verdadera razón estaría, de nuevo, en un cambio de estrategia de la firma italiana que se reinventaría como fabricante de coches pequeños y eléctricos. Así, Olivier François explicó que en el futuro no tendrán coches grandes, ni premium, ni deportivos. Fiat tendrá solo dos vertientes. Por una parte estará la familia del Fiat 500 y por otra la del "transporte de familias" (coches funcionales, sin más). Todos los modelos que presente la marca tendrá entre 3,50 metros y 4,50 metros de largo.
También añadió que seguirían presentes en el segmento C (como el Tipo), pero no mucho más tiempo, recalcando que necesitan coches eléctricos y más coches derivados del Fiat 500 con cierta legitimidad para aumentar el margen de beneficio.
Olivier François no ha hecho más que confirmar lo que se viene diciendo desde hace tiempo. Fiat vive del 500, del Panda y del Tipo que vende (con poco margen) a grandes flotas de toda clase, como Uber o compañías de rent-a-car.
