Debo reconocer antes que nada que siempre he visto en Felipe Massa a un piloto un pelín orgulloso y, por qué no decirlo, algo creidillo, pero la verdad es que me está sorprendiendo muy positivamente cómo el brasileño está encajando una derrota que seguro que fue de lo más duro de su carrera deportiva. Muchas veces se dice que un campeón demuestra que lo es por su manera de perder, y no de ganar. De ser así, no me queda otra que decir que Massa está dando toda una lección de como perder un título.
Ya escuchamos todos que el propio Felipe Massa envió al box de Toyota un puñado de camisetas y vestimenta de Ferrrai y Brasil para que los mecánicos, ingenieros y pilotos de la escudería japonesa pudieran salir del siempre conflictivo entorno del trazado de Interlagos sin problemas. Pero no todo acaba ahí. Hoy mismo he leído unas declaraciones de Massa sobre la decisión del título que no me dejan otra opción que aplaudir bien fuerte al brasileño:
"El Mundial se gana en 18 carreras y no en la última curva. No podemos acusar a nadie, sino pensar en corregir nuestros errores".
Sensacional. Se puede decir más alto, pero no más claro. Felipe Massa, sin lugar a dudas, está demostrando que es todo un campeón a la hora de perder. Ahora tendrá que demostrar que también lo es a la hora de ganar, aunque eso, quizás sea un pelín más complicado...
