De cuando Peugeot se alió con McLaren para ganar también en la Fórmula 1 pero descubrió que los monoplazas son otra historia
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De cuando Peugeot se alió con McLaren para ganar también en la Fórmula 1 pero descubrió que los monoplazas son otra historia

La Fórmula 1 es la categoría reina del automovilismo prácticamente desde los inicios de la misma. Es el anhelo, el motivo de deseo de todas las grandes marcas, que quieren triunfar en ella. Es difícil encontrar a un gran fabricante de coches que no haya tenido al menos un proyecto para entrar en la Fórmula 1. Pero el de Peugeot no fue uno más.

La marca del león abandera la lista de los grandes fracasos de la historia de la Fórmula 1. No porque su proyecto fuese especialmente ruinoso, que no lo fue comparado con los de otros grandes fabricantes, sino porque Peugeot es dentro de las grandes marcas de coches la que más carreras de Fórmula 1 ha disputado sin ganar ninguna.

Jean Todt estaba al frente de un proyecto como equipo propio, pero era demasiado caro para PSA

Jean Todt Peugeot

A mediados de los 90 Peugeot lo tenía todo para triunfar en la Fórmula 1. El director de su proyecto deportivo era Jean Todt, que con el tiempo ha quedado más que demostrado que algo sabía. Como diseñador de sus coches tenían al argentino Enrique Scalabroni, con experiencia en Ferrari y Lotus. Y, sobre todo, Peugeot venía arrasando en el automovilismo.

Desde que Todt se puso al frente de Peugeot Sport en 1984 la marca del león estaba arrasando. En 1985 y 1986 ganaron los mundiales de pilotos y constructores del WRC con el Peugeot 205 Turbo 16, de 1987 a 1990 también se llevaron cuatro París-Dakar consecutivos con el mismo coche, y en 1992 y 1993 culminaron ganando dos veces las 24 horas de Le Mans con el Peugeot 905 Evo.

Peugeot 205 Wrc Dakar

Peugeot estaba en la cima del automovilismo. Lo estaban ganando todo, y creyeron que en la Fórmula 1 también serían capaces. Todt y Scalabroni se pusieron manos a la obra. La idea era presentarle un boceto del proyecto a Jacques Calvet, el presidente de PSA por entonces, para que evaluase las opciones de entrar en la Fórmula 1.

Todt consiguió el patrocinio de dos grandes empresas como Total y Perrier, llegó a un acuerdo con Michelin para que suministrase los neumáticos y eligió un motor V10 de 3.5 Litros que ya habían usado en el Mundial de Sportprototipos para el Peugeot 905. Con él correrían en la Fórmula 1 a partir de 1994.

Peugeot 905 Le Mans

Por su parte, Scalabroni diseñó el chasis e incluso llegó a probarlo en el túnel de viento de Vélizy-Villacoublay, propiedad de Peugeot. Como era el que más experiencia tenía en la Fórmula 1, también hizo informes sobre cómo funcionaba. El personal necesario, los procedimientos y, lo más importante, el presupuesto que hacía falta para ganar.

Cuando Perrier vio los informes el veredicto fue claro. Denegaron el plan y desmontaron el proyecto. Correr en la Fórmula 1 era demasiado caro para Peugeot. Las grandes dominadoras de la categoría, McLaren y Ferrari, gastaban en torno a 500 millones de euros, haciendo el cambio a la moneda actual, en ganar. Y Peugeot no iba a ir a la Fórmula 1 para menos que eso.

Hakkinen Mclaren F1 1994

Así que el proyecto se desintegró. Jean Todt recibió una oferta de Ferrari y se fue a Maranello a hacer historia vestido de rojo. Junto a Michael Schumacher, Ross Brawn y Rory Byrne, ganaron seis títulos consecutivos de constructores y cinco de pilotos. Por su parte, Enrique Scalabroni regresó a Gran Bretaña y empezó a trabajar para Ikuzawa.

Pero cuando se cierra una puerta se abre una ventana. Peugeot tenía un motor V10 idóneo para la Fórmula 1. Desarrollaba 760 CV a 14.250 rpm. Y en el informe de Scalabroni decía que ser solo motoristas, como eran sus rivales de Renault, costaba menos de la mitad. Apoyados en la estructura adecuada, Peugeot podría ganar en Fórmula 1 sin gastar más de la cuenta.

La unión con McLaren solo duró un año y causó los peores resultados en once temporadas

Mclaren Peugeot F1 1994

Y la oportunidad surgió. McLaren llevaba un tiempo buscando un motorista tras el divorcio con Honda. Lo intentaron con Ford en 1993, pero la cosa no funcionó hasta el punto de que Ayrton Senna se cansó y se fue a Williams. Para Peugeot, era una oportunidad única. Vale que Senna ya no estaba, pero seguía siendo McLaren, el gran dominador del último decenio.

Además de Peugeot, había otro gran fabricante que se había quedado con su proyecto para ingresar en la Fórmula 1 colgado y con un bonito motor sin utilizar. Se trataba de Lamborghini, que había fracasado de forma garrafal en su entrada en la categoría a principios de los 90, pero que tenía un motor V12 que era muy jugoso.

Ayrton Senna Mclaren Lamborghini F1 1993

Senna llegó a probar el V12 de Lamborghini, pero no le convenció para seguir en McLaren. Se marchó a Williams, donde utilizaría motores Renault, precisamente la competencia de Peugeot. McLaren, que siempre busca tener un motorista único que se centre en ellos con exclusividad, tenía que elegir entre las dos opciones.

Y finalmente eligieron a Peugeot. Al fin y al cabo, los franceses eran un melón por abrir, que además estaba triunfando en el resto de categorías, mientras que Lamborghini ya había fracasado estrepitosamente con aquel Módena Team y el Lambo 291. Si a Senna no le convenció, pocas pruebas más hacían falta para irse con Peugeot, aunque fuese por descarte.

Mclaren Peugeot F1 1994 Fire

Pero las cosas no fueron como se esperaba. Como decimos, McLaren históricamente ha buscado tener un motorista exclusivo, por lo que vetaron las negociaciones de Peugeot para suministrar también a Benetton, Larrousse y Jordan. No fue ningún favor ni para Peugeot ni para la propia McLaren, porque esos motores necesitaban de kilometraje en pista.

El rendimiento no era malo, pero la fiabilidad era espantosa. En las dos primeras carreras hubo cuatro abandonos de McLaren, tres de ellos por avería y uno por un accidente en las primeras vueltas. Sin embargo, en el fatídico Gran Premio de San Marino de 1994, Peugeot pudo acabar la carrera. Y con éxito.

Schumacher Hakkinen Imola F1 1994

El día que murió Ayrton Senna en Imola fue la primera vez que Peugeot se subió a un podio de Fórmula 1. Mika Hakkinen terminó tercero en aquella carrera de infausto recuerdo para el automovilismo. McLaren seguía siendo un equipo competitivo y el Peugeot, cuando acababa, no era malo.

Entre averías e incendios los podios siguieron llegando. Martin Brundle fue segundo en Mónaco detrás de Michael Schumacher. En las once primeras carreras de Peugeot en la Fórmula 1, los pilotos de McLaren acumularon 17 abandonos, prácticamente todos por averías, y cuatro podios. Es decir, que cuando el Peugeot acababa, saboreaba el champagne.

Hakkinen Peugeot F1 1994

Pero aún así la temporada fue ignominiosa para un equipo de la entidad de McLaren. Acabaron con ocho podios, sí, pero sin ninguna victoria y con 20 abandonos. McLaren fue cuarta por constructores, su peor resultado desde 1983. Y a Woking llegaron propuestas que no se podían rechazar. Un gran fabricante quería entrar con todo en la Fórmula 1.

Ron Dennis consiguió que Mercedes se uniese a McLaren a partir de 1995, dando inicio a la que ha sido una de las alianzas más sólidas de la Fórmula 1 moderna. Peugeot se quedó compuesta y sin novia, sin la posibilidad de una segunda temporada que le demostrase a McLaren que podían hacerles ganadores. Así que buscaron nuevo socio.

Con Jordan los problemas de fiabilidad del V10 de Peugeot fueron a más

Fisichella Jordan Peugeot F1 1997

Y ese fue Jordan. Peugeot retomó el contacto con el equipo irlandés para montar en ellos sus motores. No eran McLaren, pero Jordan era una estructura que poco a poco iba creciendo en la Fórmula 1. Sin embargo la historia no fue mucho mejor. Y eso que la pareja de pilotos la formaban dos jóvenes talentos que acabarían en Ferrari: Eddie Irvine y Rubens Barrichello.

Pero las averías siguieron siendo la constante. 19 abandonos en 17 carreras, y solo uno de ellos no fue por problemas mecánicos. Eso sí, rozaron la victoria en el Gran Premio de Canadá, donde Barrichello terminó segundo e Irvine lo hizo en tercera posición, ambos detrás de Jean Alesi. Fue el primer y único doble podio de Peugeot en la Fórmula 1.

Irvine Peugeot F1 1995

La cosa no mejoró mucho en las dos temporadas siguientes. La fiabilidad mejoró levemente, pero el motor Peugeot seguía siendo frágil pese a las constantes actualizaciones. Aún así, en 1997 parecieron recobrar el rumbo con Ralf Schumacher y Giancarlo Fisichella como pareja de pilotos en Jordan.

Hicieron tres podios, Fisichella incluso fue segundo en Spa, y en el Gran Premio de Argentina, cuando iban segundo y tercero y estaban atrapando a Jacques Villeneuve, se chocaron entre ellos. Pese a que fue el mejor año de la unión Jordan-Peugeot, los irlandeses se fueron con Honda y los franceses buscaron el más difícil todavía.

El último fracaso fue con Alain Prost: un equipo 100% francés en la Fórmula 1

Alain Prost Peugeot

Después de esta separación, que muchos dijeron que fue forzada por Peugeot para terminar con su estancia en la Fórmula 1, el piloto más importante de la historia de Francia evitó la huida. Alain Prost había comprado Ligier, le había puesto su apellido al equipo y convenció a Peugeot para que se quedase con ellos. Un último baile en la Fórmula 1 puramente francés.

El reglamento técnico cambiaba, entre otras cosas para introducir los neumáticos rayados. El proyecto 100% francés de la Fórmula 1, incluso con Olivier Panis como piloto estrella, veía un resquicio para colarse en la élite. Sin embargo fue un desastre que terminó definitivamente con el paso de Peugeot por la categoría.

Alain Prost Peugeot F1

En 1998 hubo otros 20 abandonos, casi todos por problemas mecánicos. Prost solo sumó un punto gracias al sexto puesto de Jarno Trulli en Spa Francorchamps. El equipo francés solo terminó por delante de los que no puntuaron, Minardi y Tyrrell. Por suerte para ellos, en 1999 la cosa mejoró un poco.

Lograron estar entre los diez primeros con cierta regularidad e incluso en Nürburgring les cayó un podio llovido del cielo. Jarno Trulli terminó segundo a 22 segundos del ganador, Johnny Herbert. Curiosamente, es lo más cerca en tiempo que ha estado un motor Peugeot de ganar una carrera de Fórmula 1.

Trulli Nurburgring F1 1999

Pero el proyecto estaba sentenciado. Jacques Clavet, que era el principal, y a estas alturas casi el único, defensor del proyecto dejo de ser presidente de PSA. Su sustituto, Jean-Martin Folz, vio todo con más perspectiva. Habían entrado en la Fórmula 1 para ganar y ahora celebraban sumar un punto porque era 100% francés. Así que enfocó la vertiente deportiva a volver al WRC con el Peugeot 206.

Aún así, hubo una última temporada en la Fórmula 1, para desgracia de Peugeot. En el año 2000 el león siguió con Prost para no sumar ni un mísero punto y terminar últimos el mundial, detrás incluso de Minardi. Tuvieron hasta 22 abandonos por problemas mecánicos. Al acabar la temporada no hizo falta ni justificar por qué Peugeot dejaba la Fórmula 1.

Peugeot es el fabricante con más carreras en la Fórmula 1 sin lograr poles ni victorias

Heidfeld Espana F1 2000

Para muchos, es el peor fabricante que ha pasado por la Fórmula 1. Lógicamente, contabilizando tan solo a los que sí que llegaron a poner su proyecto en marcha. Casos como el de Lamborghini o el de Subaru simplemente no entran en consideración porque prácticamente fueron planes abortados antes de empezar.

Con los números en la mano, solo hay un gran fabricante que ha corrido más Grandes Premios que Peugeot sin ganar nunca una carrera ni hacer una pole position. Se trata de Yamaha, que participó en 116 Grandes Premios de Fórmula 1. Peugeot tomó partida en un total de 115, tan solo uno menos que los de Iwata.

Webber Monaco F1 2004

Pero Yamaha al fin y al cabo no es más que una marca de motos que se metió a la Fórmula 1 para dar salida a sus motores más poderosos. Quizá los casos más similares al de Peugeot los podríamos encontrar en Toyota y Jaguar. Ambos se embarcaron en la Fórmula 1 a principios de siglo, los japoneses en 2002 y los británicos en el 2000, y ambos se fueron con más pena que gloria. Eso sí, fueron equipo propio, no solo motorista.

Toyota disputó más carreras que Peugeot, 139, y no ganó ninguna. Pero al menos sí que logró tres poles position precisamente con Jarno Trulli y Ralf Schumacher, dos pilotos que también lidiaron con el proyecto de Peugeot. En cuanto a Jaguar, disputaron 85 Grandes Premios hasta 2004 con dos podios como botín.

Prost Peugeot Canada F1

Pero lo peor para Peugeot fueron las comparaciones. Mientras que sus motores solo salían en las noticias para hablar de los incendios que habían provocado en sus coches, Renault ganó cuatro títulos consecutivos de constructores y tres de pilotos. Peugeot estaba dominando todo el automovilismo mundial, pero la Fórmula 1 se rige por sus propias normas, y allí mandaba el rombo.

Después de aquella mala experiencia, Peugeot Sport reencaminó la andadura del león en la competición hacia lo viejo conocido. En el año 2000 y en 2002 ganaron el WRC con Marcus Grönholm, y además hicieron el triplete en constructores añadiendo el de 2001. También en Le Mans volvieron a triunfar en 2009 con el español Marc Gené a los mandos del Peugeot 908 HDI FAP.

Peugeot Wec Hypercar 2022

En el Dakar tardaron un poco más, pero entre 2016 y 2018 encadenaron tres victorias consecutivas, las dos primeras con Stéphane Peterhansel y la tercera con Carlos Sainz. En 2022 regresarán al WEC de los hiperdeportivos para volver a pelear por las 24 horas de Le Mans. Pero la lección está aprendida: la Fórmula 1 no una opción.

La de Peugeot fue una demostración más de lo dura y diferente que es la Fórmula 1. Se necesitan años de experiencia en el desarrollo de un prototipo, personal muy experto y el dinero por castigo para aspirar de verdad a un título. Sin eso, ganar una carrera solo es posible si alguna vez sale cara. Y para Peugeot la Fórmula 1 estuvo llena de cruces.

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Comentarios cerrados
    • brillante

      Mi enhorabuena por el artículo. Se critica cuando hay que hacerlo pero también se elogia cuando es totalmente merecido.
      Mclaren siempre ha sido una casa de pu*** respecto a los motores. Después de las peleas con honda exigiéndoles mejoras (les debió de parecer poco el V12) pillaron el ford creyendo que iban a tener una ventaja de chasis como en el 88' pero aunque era un motor muy eficiente no había manera de ser competitivo con la poca potencia que ofrecía respecto a los V10 y los V12 punteros. Senna realmente se quedó sorprendido del motor lamborghini y de hecho de aquellas le dio a Mauro Forghieri (ex ferrari mano derecha de Enzo que se fue a lamborghini a llevar los proyectos deportivos) consejos sobre el motor y le hizo caso y modificó el motor. El mclaren con el lambo fue en silverstone más de un segundo más rápido y seguramente hubiera sido más con un chasis adecuado porque el que usaron fue un apaño sobre el chasis del motor ford. La diferencia entre el lambo y el ford era de unos 70cv, por muy ligero y eficiente que fuera el ford era demasiada diferencia.
      Cerrando el capítulo del motor ford se van con peugeot. Peugeot lo tenía todo. Ingenieros, y casualmente un V10 3.5 del WEC perfectamente válido para la normativa de f1. Y pasó lo que ha pasado miles de veces en la f1. Que ahi hay que exprimir hasta la última gota de rendimiento y al aumentar las prestaciones del motor este no era capaz de soportarlo. Y como se ha demostrado muchas veces es difícil reingenierizar un motor poco fiable porque normalmente exige hacer cambios muy profundos. Además siempre me quedó la impresión de que Peugeot no terminó de volcarse del todo con el motor.
      Respecto a yamaha fue un desastre pero no tanto como su compatriota subaru. El motor yamaha no era un diseño nuevo, fue una modificacion que hizo la propia yamaha sobre el V10 Judd que era razonablemente fiable pero no daba la talla en absolutamente nada. Y el experimento salió muy mal. Subaru encargó a Motori Moderni un 12 cilindros boxer que no entraba en ningún chasis de la f1, una empresa no apta para desarrollar un motor puntero de f1, y un concepto que no era el adecuado. El desastre estaba claro.
      La f1 de después de los motores turbo fue muy interesante desde el punto de vista de la ingeniería de motores. Los V10 demostraron ser la solución más equilibrada pero hemos visto de todo y como todos los fabricantes querían un trozo del pastel quedándose muchos de ellos por el camino.

    • A mi me parece recordar que Senna tuvo buena impresión de Lamborghini. Su veredicto fue que tenía potencial y con más desarrollo podría estar a la altura de la competencia.

      También, si no recuerdo mal, los trabajadores de Ligier señalaron a Prost como culpable del fin de la colaboración con Peugeot. Parece ser que el ex piloto fue un pésimo gestor. Después vino la quiebra. Una pena.

      Los Prost Peugeot azules son para mi uno de los F1 más bonitos que ha habido.

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    • Avatar de mytek998 Respondiendo a mytek998

      Los Prost te gustan por el color?

      Si es por la combinación de colores, me encantan los Minardi del ‘85 al ‘92 y los McLaren Marlboro, del MP4/1 al MP4/11.

      Si es por el diseño, donde se ponga el Jordan 191...

    • Esta claro que los malos resultados fue porque Peugeot no se volco totalmente con los proyectos de F1,es una marca que a demostrado mas que suficiente que cuando van a ganar algun campeonato lo consiguen en disciplinas muy diferentes como son el WRC,WEC y Dakar.

    • Muy buen artículo, aunque también había leído que a Senna le gustó el motor Lamborghini de Mauro Forghieri.

      No me entra en la cabeza que una firma como Peugeot, no fuese capaz de conseguir en 7 años un motor fiable.

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    • Avatar de josepmaria.masfolch Respondiendo a tyrrell-p34

      Viendo que no entraron con equipo en la f1 por presupuesto yo creo que simplemente la marca no respaldó el proyecto todo lo que debería y las mejoras eran escasas. También seguramente haya influido la marcha de Todt a ferrari después de la negativa de montar equipo propio.

    • Ami me suena que a Senna si le gusto el motor Lambo, y que Dennis con esa tirania que le caracterizaba le dijo que no, y Lambo solo se embarcaria en F1 de la mano de Senna.

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