Ferrari acaba de anunciar dos nuevos planes de ampliación de garantía que permiten a los propietarios de sus superdeportivos híbridos sustituir las baterías de alto voltaje de sus vehículos en determinados plazos: pero no será ni gratis, ni barato.
El objetivo de la marca con esta medida es “evitar la depreciación temprana de las baterías, preservar el rendimiento y el valor” de sus coches, ya que las baterías (que tienden a perder eficiencia con el tiempo) no sólo son el corazón de los coches electrificados, sino que son elementos fundamentales para determinar su valor.
Ferrari ya ofrece una garantía de cinco años para las piezas de sus híbridos
Como parte de sus nuevos programas ‘Warranty Extension Hybrid’ and ‘Power Hybrid’, Ferrari sustituirá los paquetes de baterías de alto voltaje (HVB, por sus siglas en inglés) de los superderpotivos híbridos “en su octavo y en su decimosexto año de vida”, ha dicho la marca italiana. Además, estos dos programas serán transferibles a cualquier propietario posterior.
Con el objetivo de “preservar el rendimiento y la excelencia” de sus modelos híbridos a lo largo del tiempo, Ferrari también ha anunciado que “en caso de futuros avances en la tecnología de las baterías, el HVB de sustitución será un componente de última generación que garantizará el mismo rendimiento que el original”, señaló. Pero esto no será gratis, ni mucho menos.
Pueden comprarse en paquetes renovables de dos a cuatro años y, según han declarado fuentes cercanas de la marca a Reuters, “cuestan alrededor de 7.000 euros al año”, y también se aplicarán al nuevo modelo totalmente eléctrico que Ferrari prevé lanzar el próximo año.
Estos dos nuevos programas, que se unen a los cinco años que ya tiene Ferrari para las piezas de su cadena cinemática híbrida, también ofrecen distintas formas de ampliación de la garantía de fábrica sobre la totalidad de los coches y sobre sus principales componentes del sistema de propulsión.
La icónica marca italiana, que lleva vendiendo superdeportivos electrificados desde 2013 (incluyendo el LaFerrari, el SF90 Stradaley los 296 GTB y 296 GTS), se une así a otras marcas de superdeportivos que ya han implementado medidas para asegurar el valor y el rendimiento de sus coches híbridos y eléctricos.
Por ejemplo, Porsche ofrece una garantía de ocho años o 160.000 kilómetros para las baterías de sus modelos eléctricos e híbridos enchufables, como el Taycan y el Panamera E-Hybrid. Esta cubre cualquier defecto de fabricación y garantiza que “las baterías mantendrán al menos el 70 % de su capacidad original” durante el período de garantía.
Lamborghini, por su parte, ha anunciado programas de mantenimiento y extensión de garantía específicos para su primer modelo híbrido enchufable, el Sián FKP 37, asegurando que las baterías y otros componentes clave del sistema de propulsión eléctrica están cubiertos un período de hasta diez años.
Las garantías extendidas y los programas de mantenimiento específicos como estos para las baterías son medidas cruciales cada vez más comunes, pensadas para una mayor confianza de los compradores de coches de lujo tanto híbridos como eléctricos. Estas iniciativas no solo aseguran el valor de reventa de los vehículos, sino que también garantizan que los coches mantendrán su rendimiento y eficiencia a lo largo del tiempo.
Para los comunes mortales, estos costes adicionales no son precisamente un asunto baladí, pero para los propietarios de superdeportivos, quienes buscan la máxima excelencia, estos planes representan una inversión que protege tanto su compra inicial como la experiencia de conducción de alta gama que esperan de marcas como Ferrari, Porsche o Lamborghini.