¿Te sientes vigilado cuando conduces? Decir que “no” es casi una utopía, basta echar un vistazo a nuestro alrededor para darnos cuenta de que las cámaras y los radares forman parte del entorno paisajístico de cualquier calle o carretera.
En nuestro país hay alrededor de unos 2.000 radares fijos o móviles, que controlan además de la velocidad, el uso del cinturón o el móvil, y cuya ubicación es pública y puede ser consultada en la página de la Dirección General de Tráfico.
En unos coches inundados de tecnología que nos ayuda en las maniobras más frecuentes, que corrige nuestra trayectoria o que nos avisa si estamos cansados, también cabe la tecnología que nos avisa de la presencia de estos amigos los radares. Pero, ¿vale cualquier sistema?
Existen diferentes tipos de aparatos para conocer la ubicación de los radares, pero conviene conocer bien qué hace y cómo lo hace cada uno, y sobre todo si están o no permitidos.
Lo que dice la ley
LA LEY DISTINGUE ENTRE LOS SISTEMAS DE DETECCIÓN DE RADARES O CINEMÓMETROS Y LOS SISTEMAS QUE EXCLUSIVAMENTE INFORMAN AL CONDUCTOR
La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, en su modificación de 7 de abril de 2014, en su artículo 11 «Normas generales de conductores», menciona expresamente la prohibición de los sistemas de detección de radares o cinemómetros, mecanismos que no pueden confundirse con los sistemas que tienen como fin exclusivamente informar de la ubicación de los mismos, ni tampoco con los inhibidores de radares o cinemómetros, los cuales ya estaban prohibidos con anterioridad.
Como muy bien se justifica en el texto legal, no sería muy coherente concienciar a los conductores acerca de adecuar la velocidad a las limitaciones existentes y no prohibir la comercialización de dispositivos que se encaminan precisamente a lo contrario.
Y desde luego, no parece lógico ni justo que coexistan conductores que respetan los límites de velocidad junto a otros que disponen de mecanismos que les pueden permitir eludirlos. Además, esta prohibición se complementa con pérdida de puntos, como mensaje claro del reproche que se pretende.
Pero, ¿qué tipos de ayudas hay?, ¿son todas legales?
Muchos conductores no tienen muy claro qué es cada cosa. Según una reciente encuesta de Fundtrafic, el 81% de los conductores encuestados utiliza algún dispositivo de ayuda a la conducción legal o no, pero lo que sorprende es que entre aquellos que utilizan sistemas ilegales un 70% desconoce que lo son.
LA FORMA EN QUE EL DISPOSITIVO OBTIENE LA INFORMACIÓN ES LA QUE MARCA LA FRONTERA ENTRE LO LEGAL Y LO ILEGAL
La legalidad o no en este caso lo marca la forma en que se obtiene la información. Esta puede obtenerse de una base de datos previamente cargada en el navegador o avisador, lo que es completamente legal o por el contrario la ubicación del radar puede ser detectada por el aparato, en cuyo caso hablaríamos de un dispositivo ilegal. Un paso más allá lo darían los inhibidores, los cuales además anulan el funcionamiento del radar, y lógicamente, también son ilegales.
Los inhibidores
El uso de estos dispositivos está completamente prohibido, se trata de aparatos que impiden el funcionamiento de los radares emitiendo una frecuencia que anula la que emite el radar.
Existen dos tipos de inhibidores, por una parte los que inhiben la señal de los radares convencionales captando las ondas de los radares fijos y móviles, que emiten una señal en la misma frecuencia pero de mayor potencia, con lo que anulan la señal del radar.
LA INFRACCIÓN POR LLEVAR UN INHIBIDOR ES MUY GRAVE, 6.000 € DE MULTA Y 6 PUNTOS MENOS
Por otra parte están los que inhiben los radares o pistolas láser, los cuales detectan cuándo la Policía o la Guardia Civil nos están apuntando con una de estas pistolas y emiten unos códigos que provocan un error en la medición de la pistola.
La ley dice expresamente que “se prohíbe instalar o llevar en los vehículos inhibidores de radares o cinemómetros o cualesquiera otros instrumentos encaminados a eludir o a interferir en el correcto funcionamiento de los sistemas de vigilancia del tráfico, así como emitir o hacer señales con dicha finalidad. Asimismo, se prohíbe utilizar mecanismos de detección de radares o cinemómetros”.
La infracción por llevar instalado un inhibidor es muy grave, aunque éste no esté funcionando puede suponer una multa de 6.000 euros y la pérdida de 6 puntos. Por cierto, al taller instalador también puede ser multado.
Los detectores
La diferencia fundamental de este dispositivo con el inhibidor, es que el detector no inhibe la frecuencia del radar, pero sí interactúa con él para captar su señal. Por lo tanto el conductor deberá aminorar la marcha para no ser multado, ya que no actúa contra el radar.
La sanción por utilizarlo es de 200 euros y pérdida de 3 puntos en el permiso de circulación.
Consideración | Infracción | Sanción | Retirada de puntos | |
---|---|---|---|---|
Avisador | Legal | - | - | - |
Detector | Ilegal | Grave | 200 € | 3 |
Inhibidor | Ilegal | Muy grave | 6.000 € | 6 |
Los avisadores
Se trata de los únicos sistemas legales ya que básicamente se trata de una base de datos previamente cargada que en combinación con el sistema de localización GPS alerta al conductor de la presencia del radar.
Los avisadores se nutren principalmente de las bases de datos de la DGT cuyo acceso es público. Pero para dar una mayor información y servicio al conductor también cuentan con los avisos de otros conductores, los cuales tras pasar un filtro bien de un administrador o mediante un sistema de valoraciones, pasan a formar parte de la información que se ofrece a los conductores. Se trata por lo tanto, de aplicaciones sociales en las que la contribución de los conductores enriquece las bases de datos, no sólo de radares, sino también de otro tipo de acontecimientos más temporales como vehículos averiados, retenciones, etc.
LOS AVISADORES SON LOS ÚNICOS DISPOSITIVOS LEGALES, YA QUE MUESTRAN AL CONDUCTOR INFORMACIÓN PREVIAMENTE CARGADA EN SU BASE DE DATOS
Los avisadores pueden venir integrados en el propio vehículo, como el de Coyote, en dispositivos independientes o a través de aplicaciones como Waze o SocialDrive que se pueden descargar en nuestro Smartphone, las cuales están proliferando cada vez más. Sin duda estos elementos pueden ser de ayuda para los conductores, pero no cabe duda de que no pueden, ni deben, sustituir la debida atención que debemos tener cuando conducimos. El uso correcto de la tecnología hace que la aprovechemos mucho más, le saquemos el máximo partido y no se pueda volver en contra de nosotros mediante distracciones improductivas.