Del film de James Bond 'La espía que me amó' ('The spy who loved me', 1977) recordamos todos aquel impresionante Lotus Esprit S1 capaz de sumergirse en el mar y continuar su recorrido tan campante. Bien, aquel Lotus se vendió en subasta el pasado mes de septiembre por 920.167 dólares (unos 673.400 euros) y ahora hemos sabido que el comprador fue... Elon Musk.
El directivo de Tesla Motors no sólo es un fan del curioso coche anfibio llevado a la gran pantalla, sino que se llevó una decepción al saber --inocente...-- que todo era mentira magia del cine, que el coche ni se transforma ni nada. Pero, como buen emprendedor, Musk le dio una vuelta al asunto:
Lo que voy a hacer es actualizarlo con una cadena cinemática Tesla y voy a intentar que se transforme de verdad.
Así que, quién sabe, lo mismo en un futuro no muy lejano (o sí) vemos por la calle un maravilloso Tesla Model H₂O, a prueba contra inundaciones. Este hombre parece ser capaz de eso y de cualquier otra cosa que se proponga. Para todo lo demás, aquella infografía sobre los coches de James Bond (aunque ya nos dijisteis que no era del todo exhaustiva):