Cuando probamos el Mercedes-AMG C 63 S en el circuito de Portimão, allá por el mes de febrero, una de las cosas que no echamos en falta fue potencia, y es que la versión más potente de la Clase C va sobrada precisamente de fuerza bruta. Aún así, Brabus ha preparado una serie de mejoras para el modelo, que lo convierten en una bestia todavía más intimidante, ya sea berlina o familiar.
Lo que podremos ver en el Salón de Frankfurt es un aumento de 90 CV para el motor 4.0 litros V8 biturbo, gracias a un nuevo módulo de control electrónico. El resultado son 600 CV a 5.800 RPM (510 CV de serie) y un par motor máximo de 800 Nm (frente a 700 Nm), entre 1.750 y 4.500 vueltas. Además, el sprint de 0 a 100 km/h supone 3,8 segundos y la velocidad máxima se eleva a 300 km/h.
Brabus también incorpora al modelo un nuevo sistema de escape de acero inoxidable, que mejora las prestaciones pero también el sonido (incluída una válvula controlable desde un botón del habitáculo), así como un juego de llantas monoblock de 20 pulgadas, que se ofrecen con neumáticos Continental, Pirelli o Yokohama, en dimensiones 255/30 ZR20 (delante) y 275/30 ZR20 (detrás).
Por otro lado, a nivel estético están disponibles varios elementos aerodinámicos, desarrollados en el túnel de viento, así como piezas en fibra de carbono. Por dentro, se ofrecen desde molduras metálicas o de fibra de carbono, hasta tapicerías de cuero y alcántara, que en el caso del coche de muestra para Frankfurt es de cuero negro con costuras de color naranja.
En Motorpasión | Mercedes-AMG C 63, toma de contacto