Ha llegado el momento: la segunda generación del Ford GT se despide. Eso sí, lo hace a lo grande, con una nueva edición especial que únicamente podrá conducirse en circuito y rinde homenaje al mítico Ford GT40 Mark IV que ganó las 24 Horas de Le Mans de 1967.
Se llama Ford GT Mk IV, tiene una aerodinámica extrema y lleva su motor V6 EcoBoost biturbo por encima de los 800 CV. Solo se fabricarán 67 unidades, todas ellas de forma artesanal y los primeros clientes disfrutarán de él en la primavera de 2023, después de pagar 1,7 millones de dólares.
Lleva el sello de Multimatic
La segunda generación del Ford GT es tan espectacular que no necesitaba ningún empujón para triunfar. De hecho, su mayor problema es que su producción limitada a 250 unidades por año nunca ha sido suficiente para cubrir la demanda, ni siquiera cuando Ford decidió ampliar la fabricación.
Aun así, Ford optó por lanzar todo tipo de ediciones especiales, desde el Competition Series que llegó hace seis años, hasta el Carbon Series, pasando por todos los Heritage Edition que han rendido homenaje a los múltiples Ford GT40 que compitieron a lo largo de los años 60.
Así que el Ford GT solo podía despedirse con una edición especial. Lo hará con el Ford GT Mk IV, una bestia que no tiene nada que envidiar al Ford GT de competición que corrió varios años en la clase GTE Pro del WEC. De hecho, la firma canadiense Multimatic que gestionó ese modelo ha colaborado con Ford Performance para crear esta animalada.
Y es que su diseño es mucho más bestia que el del modelo de producción y su variante de carreras. La carrocería, que está hecha íntegramente en fibra de carbono, es completamente nueva y su aerodinámica ha sido llevada al límite, con todo tipo de apéndices, un enorme alerón trasero, varias tomas de aire y un difusor mucho más bestia que el de cualquier supercar actual.
Si Ford presentarse un hypercar para la nueva categoría LMDh del WEC y el IMSA, este GT Mk IV podría ser perfectamente el elegido. No va a ser así, pero el último Ford GT también va a estar estrechamente ligado a los circuitos, básicamente porque solo se podrá utilizar en una pista de carreras.
A diferencia del resto de ediciones especiales del Ford GT, el Mk IV no podrá conducirse en la vía pública. En esencia, es un coche de carreras que los clientes de la marca podrán comprar para ser los más rápidos de la pista, como un Pagani Huayra R o un Ferrari FXX-K Evo.
Cada cliente tendrá que pagar 1,7 millones de dólares por su Ford GT Mk IV, pero tendrán que darse prisa porque solo se producirán 67 unidades (como tributo al año en el que corrió el Ford GT40 Mk iV). Todas ellas se fabricarán de forma artesanal en las instalaciones de Multimatic.
Ford ya abierto el plazo de reservas, que deberá completarse a través de la web de Multimatic. Algunas unidades ya están asignadas y las entregas comenzarán al final de la primavera de 2023, en cuestión de meses.
A cambio de los 1,7 millones de dólares que pagarán por él, los clientes se llevarán el último capítulo de la historia de este deportivo tan especial, además de un monstruo que, según Ford, contará con una versión tan apretada del motor V6 EcoBoost que pasará de los 669 CV del modelo de serie a más de 800 CV.
También equipará una transmisión única, su chasis tendrá una distancia entre ejes más larga para mejorar el comportamiento en circuito e incluirá la suspensión adaptativa ASV de Multimatic que viene de la competición.
Larry Holt, vicepresidente ejecutivo del Grupo de Operaciones de Vehículos Especiales de Multimatic, ha dicho: “El objetivo de Multimatic era crear la versión final más extrema del Ford GT, y el Mk IV es el resultado”.
“Un motor único de mayor cilindrada, una caja de cambios de carreras adecuada, una distancia entre ejes ampliada y una carrocería verdaderamente radical han dado como resultado un nivel de rendimiento sin precedentes. Estamos orgullosos de haber sido parte del GT desde su inicio hasta este increíble canto del cisne y lo consideramos un capítulo importante en la historia de Multimatic”, ha puntualizado Holt.