Es duro, pero hay niños que mueren porque sus padres se los dejan olvidados dentro del coche. Puede pasarle a cualquiera y es un problema muy grave y que, por desgracia, ha sucedido cientos de veces a lo largo de los últimos años.
Tanto los fabricantes de sillitas infantiles como las marcas de coches utilizan desde hace años tecnología que trata de evitar que esto suceda. Ahora Toyota ha ido un paso más allá y ha desarrollado un sistema de alerta de ocupantes traseros que es capaz de llamar al teléfono del conductor si se ha dejado un niño dentro del coche.
Un radar y una llamada para evitar el desastre
Hay padres que olvidan a sus hijos dentro del coche. Como cuentan en Bebés y más, se llama Síndrome del bebé olvidado y puede pasarle a cualquiera, también a ti. Por desgracia, es algo que sucede cada año y en cualquier parte del mundo, también en España. Los fabricantes de coches son conscientes de ello y desde hace años utilizan la tecnología para intentar que nadie se deje a un bebé dentro de un vehículo.
Varias marcas equipan a sus coches con un recordatorio de ocupantes en los asientos traseros. En la mayoría de coches que equipan este sistema, el cuadro de instrumentos o la pantalla central muestran un mensaje cuando se apaga el motor y el coche detecta que los asientos traseros están ocupados, ya sea a través de sensores volumétricos o de peso. Normalmente, el mensaje va acompañado de un sonido de alerta.
Hyundai fue más allá y hace años evolucionó este sistema para que el coche, además de avisar por el cuadro e incluso a través del claxon, también mandase una alerta al móvil del conductor.
También hay sistemas de retención infantil (SRI), es decir, sillitas de niños, que incorporan un sistema de alarma que se activa si el conductor se aleja del vehículo y deja al niño dentro y envía una señal al móvil del conductor (y a otros móviles en caso de que el conductor no responda). Algunos de estos dispositivos también emiten señales sonoras. En Italia, estos sistemas de alerta son obligatorios desde 2019.
Lo que no existía hasta ahora es un coche que llamase por teléfono al conductor en caso de que un niño se quede dentro. Es un paso más en la tecnología de recordatorio de asientos traseros y lo estrena el nuevo Toyota Sienna, un monovolumen de grandes dimensiones que se vende en el mercado norteamericano.
Este sistema utiliza un radar con una frecuencia de 60 GHz montado en el techo (está oculto bajo el tapizado) para detectar si hay alguien en los asientos traseros. En caso de que alguien esté ocupando estas plazas cuando el coche se ha cerrado, las luces de emergencia parpadean y el pitido que emite el coche al abrir las puertas suena nueve veces.
Si el sensor todavía detecta movimiento 90 segundos después de ese primer aviso, hará sonar el claxon. Si después de esa advertencia sigue detectando movimiento, el siguiente paso es enviar una notificación y un SMS al móvil del conductor. Si el niño (o un animal) sigue dentro para entonces, dos minutos después, el coche llama por teléfono al conductor.
Si el coche no se cierra, pero detecta que hay alguien dentro, se salta los primeros pasos de la alerta y directamente pone en marcha el paso de mandar la notificación y el SMS al móvil del conductor previos a la llamada.
El requisito para que todo esto funcione es que el conductor se registre en la app Safety Connect de Toyota y tenga activadas las notificaciones del sistema Advanced Rear Seat Reminder. Toyota asegura que esta funcionalidad estará activa para sus clientes durante 10 años.
Un problema con consecuencias trágicas que puede pasarle a todo el mundo
Las consecuencias pueden ser trágicas, incluso aunque no haga calor porque la temperatura en el interior de un coche aparcado al sol puede duplicarse en apenas 30 minutos.
Es tan grave que, solo en Estados Unidos, desde el año 1998, 1.004 niños han muerto de calor dentro de un coche, según datos de la organización No Heat Stroke. Eso significa que, de media, 38 niños mueren cada año de esta forma en Estados Unidos, pero también hay muchos casos más cercanos.
En esas cifras se incluyen los niños que murieron por calor dentro de un coche porque sus padres los dejaron ahí consciente e inconscientemente. Hay que tener en cuenta que jamás hay que dejar a un bebé encerrado en el coche, ni cinco minutos, pero también que el Síndrome del bebé olvidado existe y que podría pasarle a todo el mundo.
“El Síndrome del bebé olvidado no es un problema de negligencia, sino de memoria. La respuesta más común es que solamente padres malos o negligentes olvidan a sus hijos en el coche, pero es una cuestión de circunstancias. Podría pasarle a cualquiera", explica en Consumer Reports David Diamond, Doctor en filosofía y profesor de psicología en la Universidad del Sur de Florida.
Es un problema de memoria y la memoria puede fallarnos a todos: se nos puede olvidar el teléfono móvil dentro del coche, pero también un bebé, por eso, la tecnología que ayuda a evitarlo es siempre bienvenida.