Sabemos que EEUU tiene un gran problema con las armas. La Segunda Enmienda a la Constitución protege el derecho del pueblo estadounidense a poseer y portar armas, un derecho constitucional que va de la mano con un aumento exponencial de los tiroteos y de muertes por armas de fuego (ya ha superado las 20.000 muertes en lo que va de año).
Y últimamente se ha convertido en algo más, porque la mayoría de armas robadas proceden de coches aparcados.
Según datos de New York Times, en 2020 se robaron más de 40.000 armas que sus dueños habían dejado en sus automóviles (lo normal, vas a por el pan y dices "para qué me voy a llevar la SIG Sauer, la dejo en la guantera").
El problema es que muchos de estos propietarios ni si quiera cierran sus coches, por lo que dejan a libre disposición una herramienta mortífera que cualquiera que acceda a ella puede utilizar para cometer delitos sin ser rastreados. Y si el vehículo objetivo es Hyundai o Kia, apaga y vámonos.
Una de las ciudades que está viviendo de cerca el problema es Nashville, donde cada mes se roban unas 100 armas de automóviles; 1.000 en lo que va de año, de las cuales el 80 % se han sustraído de vehículos.
Pero Nashville no es la única que está sufriendo esta tendencia al alza. La policía de Atlanta, Georgia, ha informado sobre el robo de unas 1.200 armas de automóviles, y en el condado de St. Louis, Missouri, y en Cleveland, Ohio, los ladrones están robando armas de automóviles aparcados en el aeropuerto de Hopkins.
2023 va camino de ser uno de los años más mortíferos por las armas de fuego en EEUU
Según datos de Amnistía Internacional, en el mundo hay en circulación más de 1.000 millones de armas de fuego. La inmensa mayoría -el 85%- están en manos de particulares, el 13% están en arsenales militares y el 2% pertenecen a cuerpos encargados de hacer cumplir la ley.
Las estadísticas de la plataforma Gun Violence Archive muestra que, hasta la fecha, 34.228 personas han muerto en EEUU por armas de fuego, entre ellas 237 niños de entre 0 y 11 años. Un aumento sustancial si tenemos en cuenta que en todo 2022 fallecieron por esta causa 20.200 personas.
Lejos de regular la tenencia de armas de fuego, las soluciones que dan los Estados más conservadores es poner guardias armados en las escuelas e institutos o entrenar a los niños y adolescentes a actuar ante un tiroteo (hay incluso pupitres diseñados para parapetar a los escolares).
Como bien reflejó Michael Moore en 'Bowling for Columbine', EEUU es uno de esos países que quedan retratados por sus políticas: te compras una lavadora y te regalan un rifle.
