Robos de coches

La clave para recuperar a su niña bonita no fue otra que un mensaje en su móvil. El resto, lo hicieron su ingenio, Internet y muchas horas pegado a la pantalla.

Lleva robando coches desde los 9 años.

Ha robado en más de una decena de concesionarios y la policía no puede hacer nada.

El robo se alargó toda la noche: tras llevarse cada coche volvió en taxi para coger el siguiente. Le identificaron fácilmente gracias a las cámaras.

El ladrón, del que se sospecha que podría pertenecer a la banda de los ‘Kia Boyz’, no sólo ignoró las señales de advertencia, sino que las quitó a propósito.

Tras el primer robo, los ladrones solo tuvieron que seguir el rastro cual migas de pan: dentro estaban las llaves de su segundo coche, un Lexus, junto documentación que indicaba su dirección.

Huyó durante 20 minutos hasta que acabó chocando contra un camión. Pese a volcar el coche, consiguió salir y escapar: aún no han dado con él.

Lo que iba a ser una plácida estancia en un lujoso hotel se convirtió en pesadilla: su RS7 quedó para el desguace.

Según datos de New York Times, en 2020 se robaron más de 40.000 armas que sus dueños habían dejado en sus automóviles (lo normal, vas a por el pan y dices "para qué me voy a llevar la SIG Sauer, la dejo en la guantera").

Chicago ha presentado una demanda civil contra Hyundai y Kia por no incluir inmovilizadores de motor en varios de sus modelos.

El timo del pincha-ruedas, la estafa del retrovisor, el timo de la lata de refrescos... son varios los métodos que usan los ladrones para robar en nuestro coche en pleno viaje. Así son estos trucos y así puedes evitarlos.

En la ciudad de Nueva York, el departamento de policía ha comenzado a repartir AirTags de forma gratuita para que los conductores los escondan en sus vehículos

Bajo este inofensivo y popular Nokia, se esconde un dispositivo electrónico capaz de engañar al sistema de arranque sin llave.

La ciudad se suma a la demanda colectiva presentada por varios clientes afectados por los robos de los coches con el método del USB. Es una de las más afectadas desde la llegada del 'Kia Challenge'.

Un dispositivo que vale más de 5.000 euros, y que se camufla en el interior de un altavoz Bluetooth, es capaz de engañar al sistema haciéndose pasar por llave conectándose desde los faros.

Los llamados Kia Boys enseñaron a robar ciertos modelos de Hyundai y Kia con un USB. Las redes sociales hicieron el resto.