Porsche, que ha participado en un ambicioso proyecto para impulsar los combustible sintéticos, está financiando un proyecto de la compañía Hydrogenious LOHC Technologies que une el hidrógeno gaseoso, altamente volátil, con un aceite.
Esto eliminaría de la ecuación el problema del almacenamiento y el transporte de este combustible, que precisa de altas presiones.
Aprovechando las bondades de los compuestos orgánicos
La empresa alemana Hydrogenious LOHC Technologies, con sede en la ciudad bávara de Erlangen, ha desarrollado un proceso con el que el hidrógeno verde se une a un aceite.
La ventaja reside en que el aceite es sumamente estable y seguro porque puede manipularse y almacenarse en condiciones ambientales. Además, no es explosivo, volátil ni emite vapores corrosivos tóxicos, como ocurre con el amoníaco.
"Embutido en aceite", explica Porsche, el gas puede almacenarse y transportarse en condiciones ambientales. Después se libera y el aceite se reutiliza para la siguiente carga en un proceso que ya ha sido patentado y que está en fase de pruebas.
Sabiendo que los compuestos orgánicos pueden absorber y liberar hidrógeno en reacciones químicas, la compañía llegó a la idea de utilizarlos para almacenar y transportar el gas.
La alta densidad de almacenamiento que promete el proceso le permite transportar cinco veces más hidrógeno que con los procesos de compresión, por ejemplo, simplificando las exportaciones desde regiones como España, Oriente Medio, África y Australia.
De momento, producir hidrógeno a partir de energías renovables -como el producido por electrólisis- está lejos de ser competitivo; por eso una plataforma apunta a reducir el costo del hidrógeno a menos de 2 dólares por kilogramo para 2026, un precio muy inferior al actual.
Pero además, para que la producción de hidrógeno verde sea competitiva es vital que se nivele el coste de las energías renovables -que supone hasta el 60 % del precio del hidrógeno verde- y su expansión.
De momento, la intención de Porsche es conseguir los socios adecuados para desarrollar plantas de producción de combustibles sintéticos, y para ello necesitan alianzas.
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