El cachondeo de los lunes con los precios de los combustibles es contagioso. Vamos a recordar brevemente en qué consiste el "efecto lunes". Aunque oficialmente ninguna de las petroleras ha reconocido los pactos, estas se ponían de acuerdo para los lunes, el día que la Unión Europea toma los datos de precios para los combustibles, bajar los precios del combustible, de manera que a efectos de un observador externo no había variaciones notables de precios y había incluso bajadas.
Sin embargo este descenso artificial desaparecía el martes para dar un brusco subidón que duraba toda la semana, hasta el domingo a las 23:59, hora en la que el precio volvía a bajar para salir bien en la foto del lunes. Una jugarreta tan legal como sucia y rastrera, que además está en la actualidad siendo investigada por la CNE, que tras años de taparse los ojos se pone en marcha.
Y se ha tapado los ojos todo este tiempo porque hasta que los combustibles no han repuntado, a los conductores no nos había rascado el bolsillo tanto y nos habíamos fijado tanto en los precios antes de repostar. Bueno, y también que el IPC gracias a estos precios falseados se mantiene a raya.
Pues bien, Repsol se ha liado la manta a la cabeza y quiere aprovechar un día tradicional de repostajes para hacer su agosto. Bueno, y su julio, ya que ha anunciado una nueva campaña que se llevará a cabo durante estos meses estivales, julio y agosto. La campaña consiste en que los viernes de cada semana serán los días en los que el consumidor encuentre en las gasolineras de Repsol el precio más bajo en los combustibles de toda la semana.
A esta bajada de precios se unirán los ya tradicionales lunes de cachondeorebaja, que según Repsol no es otra cosa que un gesto con los transportistas y profesionales que tradicionalmente repostan los lunes sus vehículos. O eso dicen.
Hoy es el primer día que se aplica la campaña y habrá que ver que harán el resto de las petroleras, porque el status quo de precios pactados podría haber volado por los aires con este torpedo lanzado por Repsol. Es de suponer que el resto de petroleras ajustarán sus precios los viernes si es que quieren vender algo, creando un nuevo efecto, el "efecto viernes".
También Campsa y Petronor, propiedad de Repsol se acogerán a esta campaña y obviamente es acumulable a cualquier otro descuento de fidelidad, ya sea de la propia Repsol o de empresas externas. Cuando pasen un par de semanas veremos en que desemboca la saludable (para el consumidor) y previsible guerra de precios que se va a desatar.
Fotografía | Flickr (M. Peinado - I) En Motorpasión | Más de medio año con el cachondeo del "efecto lunes" en combustibles
