La carrera del Gran Premio de Mónaco tuvo su mayor golpe de efecto media hora antes de que se apagara el semáforo. El Ferrari de Charles Leclerc, que salía desde la pole, tuvo problemas mecánicos en la vuelta de formación de la parrilla. Rápidamente se apuntó a la caja de cambios, pero el problema estuvo en otro sitio.
Fue el palier izquierdo del Ferrari el que falló en Montecarlo, arruinando todas las opciones de victoria de Ferrari y del héroe local. Un error muy grosero por parte del equipo que ni siquiera se cercioró de que esa parte del monoplaza estuviese en buen estado tras el golpe que se dio Leclerc durante la clasificación.
Ferrari no cambió el palier izquierdo, procedimiento habitual pese a que el golpe fuese en la derecha
"No ha sido la caja de cambios. Nosotros no apostamos, estábamos totalmente seguros de que la caja no habría tenido ningún problema durante la carrera. Necesitamos entender bien que es lo que ha pasado. El fallo está en palier izquierdo. No ha sido caja de cambios, la caja fue inspeccionada y reconstruida por la noche", comentó Mattia Binotto, el jefe del equipo Ferrari.
Aunque Binotto deja bien claro que no corrieron ningún riesgo con la caja de cambios, hubiese tenido sentido hacerlo. La de Leclerc probablemente era la única opción de victoria que Ferrari iba a tener en todo el año, y en caso de desfallecimiento, como finalmente ocurrió, Carlos Sainz estaba ahí para salvar los muebles.
Sin embargo, si hubiesen cambiado la caja de cambios de Leclerc no solo no tendrían ninguna opción de victoria, sino tampoco de podio, porque habrían arrancado sextos. Esa era simplemente una decisión para asegurar puntos de constructores, pero en cualquier caso no la tuvieron que tomar, porque la caja de cambios estaba bien.
Lo que es más incomprensible es que, tras tanto meditar si cambiaban o no la caja de cambios, no modificasen el palier de la parte izquierda, siempre comunicado con el de la derecha y que es fácil que se desforme en un golpe, aunque sea en el lado contrario. No acarreaba sanción y es el procedimiento habitual, pese a que el golpe fuese en el otro lado.
"Lo que se ha roto está en el lado opuesto al accidente, por lo tanto es posible que no tenga nada que ver con el accidente, pero es algo que debemos estudiar a analizar cuidadosamente. No, esa pieza no se revisó porque no estaba dañada", intenta justificar Binotto tras una debacle en la que dilapidaron la que podía ser su primera victoria en esta década.
¡BOMBAZO! 💣💣@CharlesLeclerc dice que tiene un problema con la CAJA DE CAMBIOS después del accidente de ayer. ¿Tendrá consecuencias?
— DAZN España (@DAZNES) May 23, 2021
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En el paddock se rumorea que Ferrari no inspeccionó minuciosamente esa zona por falta de tiempo, ya que los mecánicos tienen un toque de queda antes del cual deben salir del circuito. Pero hay dos oportunidades de romperlo en toda la temporada, y es incomprensible que ante su única oportunidad de victoria de todo el año, Ferrari no utilizase una de ellas.
Leclerc provocó una bandera roja y salió beneficiado, algo prohibido en otras categorías
Lo ocurrido en la sesión de clasificación volvió a despertar una antigua polémica: la de si un piloto que provoca una bandera amarilla o roja y sale beneficiado de ella debería ser descalificado. Es lo que pasó con Leclerc en la Q3, pero en Mónaco ya es práctica habitual. Que pregunten a Michael Schumacher o Nico Rosberg.
De forma intencionada o no, que en el caso de Leclerc parece evidente que no lo fue, lo cierto es que salió beneficiado de provocar la detención de la carrera. Se permitió el lujo de arriesgar más de la cuenta, sabiendo que un accidente también le beneficiada, aunque en este caso le salió el tiro por la culata. En la IndyCar le hubiesen quitado todos sus tiempos; aquí, hay debate.
La rueda del Mercedes de Bottas sigue atascada un día después de la carrera
El otro incidente decisivo en la carrera de Mónaco fue el que acabó con la rueda delantera derecha del Mercedes de Valtteri Bottas atascada. El piloto finlandés se tuvo que retirar cuando rodaba en segunda posición porque no había manera de sacar la tuerca, y 24 horas después todavía no han podido.
Pese a que han seguido intentándolo, el lunes por la mañana los mecánicos de Mercedes aún no han podido sacar la rueda del coche de Bottas, y ya dan por hecho que no lograrán hacerlo hasta llegar a la fábrica en Brackley. Será entonces cuando sepamos exactamente qué fue lo que truncó la carrera de Bottas cuando estaba siendo muy superior a Lewis Hamilton.
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