Día previo al arranque del Gran Premio de China de Fórmula 1 y es el turno de leer las declaraciones que ha realizado Fernando Alonso a su llegada al Circuito Internacional de Shanghái. Como no podía ser de otra forma y después de los últimos acontecimientos acaecidos en la Scuderia Ferrari, todos los medios han preguntado al asturiano sobre la marcha del que fue team manager del equipo durante los últimos seis años.
Estoy contento con el tiempo que hemos pasado juntos. No es fácil tomar la decisión que ha tomado, porque gozaba de una posición de privilegio en un gran equipo de Fórmula 1. Pero lo ha hecho mirando por los intereses de Ferrari. Creo, ante todo, que es una gran persona. Como director del equipo hizo cosas buenas, aunque se perdieran oportunidades. De no haberse perdido, podría tener tres títulos en el bolsillo.
Algunos pueden ver las declaraciones como los típicos dimes y diretes. Si las cosas hubiesen ocurrido de otra forma seguramente no había tenido que dimitir y Ferrari no se encontraría en este 2014 y con sólo tres carreras realizadas en una posición bastante incómoda.
No vamos a mejorar un segundo de la noche a la mañana, porque Stefano no hacía él solo los alerones delanteros o traseros… Seguiremos intentando mejorar, estamos aquí para reaccionar, pero tenemos que ser honestos, hay mucho que mejorar. Tenemos que progresar en todas las áreas y sabemos que hay un largo camino por recorrer. En la primera parte del campeonato no hemos sido tan competitivos como los mejores equipos, pero espero que más adelante, durante la temporada, podamos ser muy competitivos.
Me pregunto si todo el mundo en el equipo será capaz de reconocer abiertamente los graves problemas a los que se enfrentan y que de nuevo, si no se retoma el rumbo rápidamente, pueden pensar en volver a dar una temporada por perdida y centrarse en la siguiente. De momento, los antecedentes no son demasiado halagüeños.
El piloto de Ferrari también tuvo palabras para el sustituto de Stefano Domenicali, Marco Mattiaci, al cual no conoce pero al que desea la mejor de las suertes... por el bien de todos me imagino.
Necesitamos que perciba lo antes posible el apoyo de todo el mundo, para que se sienta cómodo desde el primer día y pueda dirigir al equipo con éxito. Aún no he tenido la oportunidad de hablar con él, le espero para darle la bienvenida. Trataré de ayudarle en todo lo que pueda. Tenemos que darle tiempo y dejar que se asiente.
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