Ya hemos contado en la primera parte de esta prueba cómo es el interior del Toyota Auris Touring Sports 115D, y en particular cómo es su gran y versátil maletero, así como cuál es el equipamiento de la versión Feel!, cuánto cuesta, y qué otras opciones hay en la gama para comparar.
Toca ahora hablar del funcionamiento de este motor diésel y de la conducción de la versión familiar del Auris. Ha estado muy bien poder probar tres de los cuatro motores que se ofrecen en la gama, que deberían ser además los preferidos por los compradores, el híbrido de 136 CV automático, el gasolina 120T de 116 CV, y el diésel de 112 CV. El diésel de 90 CV es la cuarta opción, que podría encajarle a ciertos conductores de conducción más calmada.
Diésel y carrocería familiar casan bien
Cada uno de estos tres motores que hemos probado tiene su encanto, y la verdad es que ofrecen un funcionamiento y prestaciones muy razonables para una conducción normal. Dependerá más de los gustos personales de cada cual, y también de cuántos kilómetros se van a hacer al año, y por dónde, para decidir cuál conviene más.
A parte de las preferencias de cada uno, de manera muy resumida podríamos decir que el híbrido estaría indicado para quien desee disfrutar de la comodidad del cambio automático y vaya a utilizar mucho el coche por ciudad, el gasolina estaría indicado para quien no hace muchos kilómetros y quiere un motor suave y silencioso, que además funciona muy bien y no consume demasiado, mientras que el diésel estaría indicado para quien va a hacer muchos kilómetros, y sobre todo por carretera o autopista.
Puestos a pensar en conjunto toda la gama del Auris, por un lado la carrocería compacta, por otro lado la carrocería familiar, y puestos a emparejar motores y carrocerías, parece tener mucho sentido combinar la carrocería familiar con el motor diésel, pues es el que ofrece la cifra de par motor más alta, y es por tanto el que ofrece mayor fuerza para mover un coche más largo y con un maletero muy grande que puede llevar muchas cosas.
A la hora de mover más kilos de carga y de enfretarnos a una pendiente, ese par extra que da el diésel nos vendrá muy bien. El motor diésel 115D que monta el Toyota Auris es un motor de cuatro cilindros en línea, 1.6 litros de cilindrada, inyección directa y turbocompresor. Entrega 112 CV y 270 Nm de par (entre 1.750 y 2.250 rpm). Está asociado a una caja de cambios manual de 6 velocidades.
El Toyota Auris Touring Sports con este motor puede acelerar de 0 a 100km/h en 10,7 segundos y sería capaz de alcanzar los 195 km/h (velocidad que no te recomendamos por otra parte). El consumo homologado en Europa en el ciclo NEDC es de 4,1 l/100 km (combinado), 3,6 l/100 km (en carretera) y 5,0 l/100 km (en ciudad).
Por si te lo preguntas, este diésel viene con stop-start para detener el motor y volverlo a arrancar automáticamente, por ejemplo cuando nos paramos ante un semáforo, y no consumir, ni contaminar, cuando no se necesita.
Toyota Auris Touring Sports 115D: un familiar ágil y de buenas prestaciones
Hay que reconocer que el Toyota Auris de carrocería familiar resulta muy práctico, gracias a su maletero y a las diferentes soluciones de versatilidad del mismo, pero algunos conductores tal vez puedan temer que la mayor longitud o peso sea un lastre en cuanto a conducción, y se inclinen por el Auris cinco puertas (berlina).
Sin embargo, la conducción del Auris familiar sorprende gratamente, tanto como que una vez al volante cuesta encontrar las diferencias con respecto a su hermano más corto.
Seguimos estando en un coche con un puesto de conducción cómodo, donde el volante queda bien de altura (no muy alto), y además tiene un tacto muy agradable, que se combina con una dirección suave, pero que responde muy bien, es rápida y no peca de parecer irreal.
Igualmente agradable es el tacto de la palanca de cambio, ni muy blanda ni muy dura, firme y precisa, muy correcta, y el del pedal del embrague, muy blando y suave para que la tarea de cambiar de marchas sea muy cómoda y descansada. Es cierto que en el diésel puede notarse el embragado un poco más brusco que en el gasolina, por dar un poco más de tirón debido a su mayor por motor, pero solo es cuestión de cogerle el punto.
El Toyota Auris Touring Sports sigue teniendo un ajuste de suspensión muy equilibrado y cómodo, con una dureza intermedia, ligeramente blanda, que no exagera mucho los movimientos de la carrocería y que transmite aplomo, seguridad y estabilidad. El Auris familiar, aunque sea más largo, gira con gran facilidad, precisión y rapidez.
Seguimos estando igualmente en un coche bien insonorizado, aunque como nos esperábamos, el motor diésel se escucha un poco más que el motor de gasolina, sobre todo al ralentí, donde se percibe cierta rumorosidad. Lo cierto es que el motor 120T de gasolina está muy logrado y es un poco más refinado.
A cambio de esa leve mayor aspereza sonora, el motor diésel da la sensación de ser más enérgico en el uso, aunque sobre el papel la cifra de aceleración sea unas décimas peor que el motor 120T. Recordando el motor híbrido, también lo es. El diésel 115D es un motor de respuesta muy lineal, que no va mal desde bajas revoluciones (unas 1.250 rpm), aunque es cierto que se nota un poco mejor a partir de aproximadamente 1.700 rpm. La verdad es que responde muy bien, es bastante elástico y la aceleración es más que suficiente. Además más allá del ralentí es bastante silencioso.
Circulando a 120 km/h en llano en sexta velocidad hemos comprobado que el motor gira muy tranquilo, a tan solo 1.900 rpm (apenas notándose ruido proveniente del motor). Aún yendo en sexta el motor tiene algo de reserva de fuerza, y por encima de unos 95 km/h no es imprescindible cambiar a una marcha más corta.
A 120, manteniendo una velocidad constante, se puede consumir muy poco. Tuvimos en algunos trayectos de este tipo consumos de unos 4,5 l/ 100 km, que no está nada mal. Si bien, con un uso general, y metiendo en la ecuación también bastante conducción por ciudad, el consumo medio con el que terminamos la prueba fue de 5,9 l/100 km (prácticamente como el híbrido, que además cuesta 300 euros menos).
Tal como te indicamos en la primera parte de la prueba, hay un Toyota Auris Touring Sports 115 D a partir de 19.750 euros, aunque esta versión que hemos probado, acabado Feel! y con algunos extras, cuesta 23.300 euros.