A principios de esta semana Audatex publicaba un comunicado en el que se analizaba el coste real del mantenimiento de los vehículos de mecánica híbrida, diésel y gasolina. El objetivo, obviamente, era el de encontrar la diferencia que supone para nuestro bolsillo conducir un híbrido, de forma clara y sencilla. Los datos sobre consumo y/o mantenimiento dados entonces llamaron la atención por ser particularmente altos.
Y hoy sabemos porqué. Al parecer Audatex había utilizado como muestra para su estudio coches de la denominada “clase premium”, o de gama alta. Estos, como todos vosotros ya sabéis, son más caros de mantener debido a las prestaciones de sus propulsores – y todo lo que ello implica – . Sin embargo, suponen tan sólo un 7% del mercado en 2012 por lo que, como dice la propia Audatex en su último comunicado, “la muestra no es del todo representativa”.
Además cabe destacar que las cifras expuestas en el primer informe se referían al coste total para un rodaje de 120.000km u 6 años, incluyendo tanto el cambio de neumáticos como el mantenimiento preventivo, correctivo y reemplazo de componentes, y no al coste anual total. Así pues se han puesto de nuevo manos a la obra utilizando el Toyota Auris Híbrido y el Toyota Yaris, por tener ambos versiones diésel y gasolina. Y, como veréis en el siguiente cuadro, ser dueño de un híbrido es hasta un 52% más económico.
Volviendo ahora sobre el coste medio anual a los ocho años de un híbrido de alta gama como es el Lexus IS, encontramos que incluso siendo más potente la motorización híbrida resulta un 29% más económica.
Audatex ha querido pedir disculpas por la confusión que haya podido producir y señala que los coches de mecánica “Full Hybrid” resultan más económicos al prescindir de, por ejemplo, embrague, alternador, motor de arranque o correa de distribución.
