Apenas un mes después de presentar la renovación de su Audi Q7, el fabricante alemán ha mostrado la variante más potente de la gama, el Audi SQ7 TDI 2019, que recurre a un motor turbodiésel de elevada potencia y llegará a los diferentes mercados europeos a finales del mes de septiembre, si bien los pedidos se abren a finales de este mismo mes.
Este SUV de grandes dimensiones conserva el motor 4.0 litros V8 TDI biturbo de 435 CV de potencia, que incorpora también un compresor eléctrico o EPC (tecnología estrenada precisamente en el SQ7 de 2016) y un sistema eléctrico de 48 voltios. Anuncia un enorme par motor máximo de 900 Nm entre 1.250 y 3.250 rpm.
El compresor, integrado en el conducto de admisión, utiliza un motor eléctrico para acelerar el propio compresor, de manera que cuando la presión de los turbos no es suficientemente alta, el compresor aporta el aire necesario para conseguir una respuesta rápida a bajas vueltas. En la práctica, el par máximo está disponible desde sólo 1.250 vueltas.
Gracias a semejantes cifras de potencia y par, promete un 0 a 100 km/h en 4,8 segundos y una velocidad máxima limitada a 250 km/h. Además, homologa un consumo medio de entre 9,1 y 9,6 litros a los cien kilómetros, en función de la versión y de las llantas y neumáticos equipados.
El motor va asociado a un cambio automático tiptronic de ocho marchas y a la tracción integral quattro con diferencial deportivo, y también son de serie la suspensión neumática, el eje trasero direccional o la dirección progresiva de desmultiplicación variable.
Opcionalmente se ofrece un paquete 'advanced' para la suspensión que añade el sistema electromecánico de estabilización activa antibalanceo, que compensa los movimientos de carrocería.
Estética diferenciada y equipamiento específico
A nivel estético el SQ7 TDI 2019 destaca por detalles específicos S, como parrilla Singleframe con dos lamas verticales, carcasas de los retrovisores en color aluminio, detalles en color plata mate o cuatro salidas de escape redondas y cromadas. Como es habitual, también se ofrece un paquete de diseño con detalles en color negro.
Las llantas del SQ7 son de fundición de aluminio y 20 pulgadas, en diseño turbina de cinco radios y calzadas con neumáticos en dimensiones 285/45. Dichas llantas esconden un equipo de frenos con discos delanteros de 400 milímetros de diámetro y traseros de 370 milímetros. En opción, Audi ofrece también un equipo de frenos carbocerámicos (420 y 370 mm).
En el habitáculo, protagonizado por el cuero y la alcántara, encontramos molduras de aluminio pulido mate (fibra de carbono en opción), asientos deportivos, detalles en acero inoxidable como la pedalera o el protector del umbral de carga del maletero, cuadro de instrumentos digital, MMI Navegación plus con punto Wi-Fi y servicios conectados, etc... Cabe apuntar que el SQ7 TDI se ofrecerá en versiones de cinco o siete plazas.
Entre los opcionales destacan asientos deportivos S plus con reposacabezas integrado y disponibles con climatización y función masaje, iluminación ambiente con 30 colores, climatizador de cuatro zonas, Head-Up Display, equipo de sonido Band & Olufsen, faros HD Matrix LED o el asistente de conducción adaptativo.