El primer modelo de la familia de coches eléctricos de Volkswagen en llegar será el I.D.: el inicio de su producción está fijado para noviembre de 2019, llegando al mercado europeo en 2020. Aunque esta saga de cero emisiones no ha empezado, ya tiene planificados varios integrantes: al I.D, le seguirá el SUV I.D CROZZ, estando también en las quinielas las furgoneta I.D. BUZZ o el I.D. VIZZION. Bien, pues a estos retoños podría sumarse otro modelo eléctrico deportivo con apellido R.
Tal y como avanza Autocar, Jost Capito, actual director de Volkswagen R GmbH, división encargada del desarrollo y diseño de las versiones más aspiracionales de la marca con sede en Wolfsburgo, ha dejado caer la posibilidad de que una variante R de los I.D. eléctricos puede ser una opción a largo plazo.
Tras el éxito del Volkswagen ID.R, que conseguía en esta edición de Pikes Peak pulverizar el récord atesorado por Sébastien Loeb en 2013 con un modelo de combustión, el fabricante alemán tiene claro que deportividad y coches eléctricos pueden ir de la mano. De hecho, el propio ID.R es considerado como un pionero o embajador para esta gama deportiva de cero emisiones por Volkswagen.
Un coche deportivo y eléctrico para el día a día
No obstante, Caspito se muestra cauto en sus declaraciones. Primero, la familia I.D. tiene que consolidarse para que el desarrollo de un eléctrico con la denominación R sea posible. Por otro lado, expone que las cosas hay que hacerlas bien y que el enfoque será lo más importante: "Si hacemos un coche eléctrico R, debe ser un todo un R o, de lo contrario, no tendría sentido".
¿Y qué se refiere con ser un R adecuado? Capito lo articula en el equilibrio entre tres pilares: autonomía, rendimiento y utilidad. En otras palabras, que cuente con un potente propulsor y que ofrezca unas prestaciones a la altura, en consonancia con un rango de autonomía generoso, pero que también sea un automóvil de uso diario, tal y como ocurre con las actuales variantes R.
Respecto a cuándo llegaría, Capito tampoco se muestra claro al respecto. La continúa evolución de esta recién llegada tecnología es la causa según el responsable alemán. "Tenemos una idea, que se basa en el desarrollo tanto de los coches de competición como de producción, pero aún no hemos definido una fecha. El desarrollo de los coches eléctricos va tan rápido que todos los meses tiene cambios. Pero en algún momento hay que pararse y decir: esto es lo que queremos, definirlo e ir por ello", comenta el directivo de Volkswagen R para el medio británico.
¿Un compacto o un SUV?
Una de las claves, tal y como confirman las palabras de Capito, será la elección del modelo eléctrico de Volkswagen que se estrene en la división deportiva R. "Todo depende de cómo definamos estos modelos prestacionales. Hay que tener en cuenta que se necesita espacio para los motores y las baterías. Es más complejo que con las mecánicas de combustión".
Con cuatro integrantes ya anunciados para la familia I.D de Volkswagen, lo lógico es pensar o en el compacto I.D., que será el primero en llegar, o en el todcamino I.D. Crozz. De hecho, teniendo en cuenta que este último contará con dos motores por eje, lo que se traduce en una mayor potencia combinada y por tanto mejores prestaciones, tendría todas las papeletas. No obstante, las versiones deportivas por excelencia en el fabricante alemán han venido de la mano de modelos compactos.
Aún queda mucho para que el primer I.D. R de producción vea la luz, aunque es bueno saber que el departamento deportivo de Volkswagen ya está pensando en aportar algo más de sal y pimienta a la saga de eléctricos de la marca.