Fernando Alonso se quedó con el volante en las manos en la última carrera de F1. Puede parecer un meme, pero empieza a no ser casualidad en Aston Martin

Fernando Alonso se quedó con el volante en las manos en la última carrera de F1. Puede parecer un meme, pero empieza a no ser casualidad en Aston Martin
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Es uno de los incidentes más surrealistas que se recuerdan en la Fórmula 1 moderna. Ocurrió el pasado viernes durante los entrenamientos libres del Gran Premio de Baréin. Fernando Alonso se quedó con el volante de su Aston Martin en la mano en plena marcha, en pista y rodeado del resto de pilotos.

Enseguida las redes convirtieron la imagen en un meme, el enésimo relacionado con la mala suerte de Alonso. Pero detrás de las bromas se esconde una realidad que empieza a ser preocupante: Aston Martin está teniendo demasiados problemas últimamente con algo que debería ser sagrado: la dirección.

Stroll ya tuvo problemas graves de dirección en Australia

Fernando Alonso con el volante de su Aston Martin en las manos en pleno circuito de Sakhir. Era una imagen condenada a convertirse en meme inmediato en las redes sociales, y así ocurrió. Muchos se complacían con la supuesta eterna mala suerte del asturiano, mientras otros se regodeaban en el mal hacer de Aston Martin. Pero el tema es más serio de lo que parece.

Cuando Alonso llegó a boxes después de conseguir recolocar el volante en la escapatoria, las caras eran un poema. Hasta Jo Bauer, el delegado técnico de la FIA, acudió al garaje de Aston Martin a entender qué estaba ocurriendo, y a no permitir que el coche volviese a salir a pista sin comprobar que era seguro.

Y es que lo de Aston Martin con la dirección empieza a ser preocupante. Hace solo unas semanas se hizo viral un vídeo de Lance Stroll en Melbourne, también durante los entrenamientos libres. El compañero de Alonso soltaba las manos del volante en línea recta, pero el coche giraba solo contra los muros.

Fernando Alonso Barein F1 2025

Algunos deseaban que lo de Alonso en Sakhir fuese solo un fallo en el anclaje del volante, pero nada más lejos de la realidad. Los mecánicos de Aston Martin tuvieron que desmontar por completo toda la barra de la dirección y sustituirla después de que Alonso se quedase con el volante en la mano.

El Aston Martin no solo está en disputa con el Sauber por ser el coche más lento de la Fórmula 1, sino que además empieza a tener sobre él una nube de coche inseguro. Más allá de los memes, la dirección debería ser lo último con lo que un equipo tuviese problemas, y la cara de Alonso tras el casco probando el volante tras el arreglo habla de todo menos de seguridad.

Esperemos que los incidentes de Aston Martin con la dirección no se vuelvan a repetir y que si ocurre la FIA tome medidas en el asunto.

Imágenes | Aston Martin

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