Volkswagen ha anunciado el cese del que fuera CEO de Audi, Rupert Stadler, "con efecto inmediato". Stadler, que permanece bajo investigación criminal por su supuesta implicación en el Dieselgate, deja las juntas directivas de Volkswagen AG y Audi AG. El consorcio ha explicado, que, como es lógico, debido a su detención preventiva en curso, "no puede cumplir con sus deberes como miembro de la junta directiva".
En la cárcel, pero ¿con una jugosa indemnización?
Como ya explicamos, los fiscales de Múnich están investigando a Stadler y a otro miembro de la alta gerencia de Audi por sospechas de fraude y publicidad falsa relacionadas con emisiones ilegales de sus automóviles y manipulación de pruebas de vehículos.
Ya había sido suspendido de sus funciones, pero con carácter temporal, y sustituido por el ejecutivo de ventas Abraham Schot como presidente interino. Tras el anuncio, el Grupo Volkswagen comunicó que el director de compras de BWM, Markus Duesmann, había sido nombrado nuevo CEO de Audi, pero avisaron de que su incorporación aún tardaría algunos meses.
Stadler fue detenido el pasado mes de junio en Alemania; la orden de arresto por parte de la Fiscalía se basa en la ocultación de pruebas, riesgo de fuga y un posible entorpecimiento de una investigación por presunto fraude y publicidad falsa en el mercado europeo.
El que fuera asistente del expresidente de Volkswagen, Ferdinand Piech, permanece aún en prisión preventiva por temor de que pueda entorpecer la investigación a través de la destrucción de pruebas.
Algunas informaciones han apuntado a que Stadler podría haber obtenido un mullido colchón económico en forma de indemnización si acepta renunciar a su cargo como presidente ejecutivo, pues aún le quedan algunos años por cumplir en su contrato y hasta que no se demuestren las acusaciones, el consorcio alemán no puede echarle. Al menos no si un acuerdo.
El despido de Stadler se produce justo cuando Alemania ha trazado un plan con la industria para evitar la prohibición de los coches diésel más contaminantes. Un plan tildado de "altamente complejo" y del que sabremos los detalles muy pronto.