Recientemente vimos una lista de coches originales pero poco exitosos entre los cuales estaba el Volkswagen Phaeton, un intento de la marca alemana de posicionarse en el segmento F con una insignia generalista, aunque de las mejor percibidas. No ha sido suficiente, aunque su fábrica sea el sueño de cualquier operario.
En Wolfsburgo se están rebanando los sesos para que la próxima generación tenga más éxito. Una opción es acortarlo y colocarlo en el segmento E, donde apenas hay generalistas, aprovechando las sinergias de plataforma con Audi, solo que a un precio inferior. Como alternativa a Serie 5, A6 o Clase E, tiene más futuro.
En el punto de mira estaría el mercado norteamericano (de donde se descatalogó en 2011), interesante para berlinas de ese tamaño, donde podría pelear con el Chrysler 300C (Lancia Thema por aquí) o Ford Taurus. De hecho, hasta podrían fabricarlo allí, y destinar la fábrica-museo actual a otras lides, aprovecharla mejor.
Solo hay que ver la jugada de las marcas asiáticas cuando se han querido meter en segmentos altos, sacarse una marca Premium de la manga, no competir directamente. Debe ser que el cliente que compra un Phaeton no quiere ver en la misma exposición un Golf o un Polo, aunque sean muy dignos, pero son coches de volumen.
Tengamos en cuenta que el Passat es diferente en Norteamérica (imagen superior), más grande, más adaptado para los gustos locales. Pues con el Phaeton se puede hacer lo mismo, colocarle donde pueda competir mejor, haga más ventas, y más dinero. Y si sacan versión de batalla larga para el mercado chino, miel sobre hojuelas.
¿Para cuándo podemos esperar a este modelo? Pues para finales de década, según Edmunds. Gracias a las sinergias de plataforma puede tener versiones híbridas enchufables, o Clean Diesel, etc. Pero antes tendrá que llegar la nueva generación del Audi A6, con la nueva plataforma modular de motores longitudinales.
Fuente | Edmunds