Seguro que más de una vez has pensado en darte una vuelta extra en uno de esos tréboles perfectos que se forman en las intersecciones de las autopistas. Ahora si lo multiplicas por el tamaño XXL con el que lo hacen todo los americanos imagina el pedazo de enlace completando los cuatro giros que se podría hacer para llegar exactamente al mismo punto de partida.
Recogiendo esta idea se han puesto manos a la obra Vaughn Gittin Jr., Ford Performance y el espectacular Ford Mustang RTR de más de 900 CV decorado para la ocasión con un intenso color verde trébol irlandés.
Ruido infernal, gas y humo en la autopista
Puede que el coche de las imágenes te suene, y no es para menos. El Ford Mustang RTR es la misma bestia con la que Gittin Jr. estuvo de paseo por Nürburgring Nordschleife dando una demostración de drifting a lo largo de los 20,76 km del circuito más complicado del mundo. Se trata de un Mustang de carreras preparado para Formula Drift cuyo motor V8 de 5.0 litros ha sido apretado hasta niveles salvajes, ofreciendo una potencia final de 912 CV.
En total Vaughn Gittin Jr. ha puesto el Ford Mustang de lado un total de 2,25 kilómetros, que es la distancia total necesaria para completar los cuatro giros en esta enorme intersección situada en Lake Worth (Texas, Estados Unidos). Sin música, sin efectos, sin aditamentos innecesarios. Sólo ruido infernal, gas y humo.
Como era de esperar los neumáticos traseros sufrieron más de la cuenta, pero especialmente el trasero izquierdo sobre el que recayó gran parte del trabajo en un ejercicio de drifting nivel: campeonato del mundo de crossfit. En varias ocasiones hubo que cambiar ese neumático al no soportar las exigencias de la grabación y acabar por pincharse.
Como el equipo pidió los permisos pertinentes y pidió la colaboración del Departamento de Policía de Fort Worth y allí son unos petrolhead, al terminar la grabación en la madrugada el teniente J.T. Manoushagian hizo entrega al equipo de unas placas conmemorativas con a modo de vías de la ciudad.