Hay ciertos clientes que no sólo piensan en un kit para potenciar su coche y tener X caballos más que los modelos de serie. Piden algo más y eso es lo que hizo el dueño de este Nissan GT-R al contactar son Switzer Performance. Quería un coche más potente pero también más ligero y maniobrable que el de serie.
Ya sabéis, eso que dicen de quítame un kilo antes de darme un caballo. Lo que viene a ser la filosofía de Lotus desde hace muchos años. Pero si le subimos la potencia, pues mejor que mejor. Con cabeza, eso sí, pero ahí está este monstruo con 800 CV y cerca de 950 Nm de par máximo.
La reducción de peso se cifra en 90 kilos, gracias al uso de una nueva línea de escape de titanio, kit de frenos AP con discos carbonocerámicos, asientos Bride de carbono y un nuevo sistema de suspensiones ajustables JRZ con estabilizadoras de aleación ligera.
En cuanto al exterior, salvo el enorme alerón de Aeromotion que le han instalado, poco más cambios parece que haya. Este alerón es activo, por lo que va variando el ángulo de ataque en función de lo que detecte que hace el coche, acelerar o frenar.
Por lo demás, no le veo ningún cambio más, salvo quizá (o son imaginaciones mías) el difusor trasero parece algo diferente y más metido debajo del coche. Pero ya digo, puede que sea algo que me estoy inventando.
Si este coche de serie ya es una buena pieza de circuito, con estas mejoras, si están a la altura de lo que se espera de ellas sobre el papel, harán que su dueño disfrute como un enano en un circuito.
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