El preparador británico Twisted sólo prepara dos modelos de coches: el clásico Land Rover Defender y, de vez en cuando, algún Range Rover de primera generación.
En 2015, Charles Fawcett, fundador de Twisted, seleccionó personalmente un lote de los últimos Defender 110 XS fabricados en Solihull. Dieciséis de esos Defender, almacenados desde su entrega en una nave, reaparecen ahora para su venta. Pero esta venta tiene truco.
Twisted Automotive propone habitualmente motores de alto rendimiento, mejoras en la suspensión y lujosas configuraciones interiores para el venerable todoterreno que dejó de producirse a principios de 2016.
La empresa pone ahora a la venta 16 ejemplares nuevos del 4x4, cual descubrimiento en el fondo de una granja cuidadosamente orquestado. Y es que esto dista mucho de ser el típico hallazgo el fondo del cobertizo, como si fuera el stock olvidado de un concesionario que desapareció.
Especulador y previsor
Así, cuando en 2015 Land Rover anunció que la producción del Defender llegaba a su fin, Charles Fawcett, encargó más de 200 ejemplares, o eso dicen. Básicamente se constituyó su stock de Defender para los años venideros.
Se acerca 2023, año en el que el Defender 110, la última evolución de un coche nacido en 1948, cumplirá 40 años. Y qué mejor momento para poner a la venta 16 unidades del Defender 110, cada una de ellas siendo única y la última fabricada con una determinada configuración o un determinado color.
Eso sí, todos ellos tienen el acabado XS de gama alta y serán reconfigurados a gusto del cliente por por Twisted. Sólo hay disponibles ocho Utility Wagons (de cinco plazas sin lunas traseras laterales) y ocho Station Wagons (de siete plazas y con lunas laterales traseras).
Cada uno de esos Defender está disponible con motor gasolina o diésel. El gasolina es el 4 cilindros turbo de 2.3 litros de 308 CV y 475 Nm de par. Mientras que el diésel es el 4 cilindros 2.2 litros turbo de 174 CV y 421 Nm de par. En cualquier caso la caja de cambios será manual y contarán, obviamente, con tracción integral y reductora.
Algunos de estos coches se fabricaron a finales de 2015 y otros en enero de 2016. Pero todos han sido matriculados en 2016 y han recorrido menos de 50 km.
Pero Twisted no se limita a ponerlos a la venta. También los preparará al estilo Twisted. A saber, una suspensión más progresiva, llantas de 18 pulgadas, faros y pilotos traseros LED, un moderno sistema multimedia y una tapicería de cuero a gusto del cliente y asientos baquets.
Dependiendo de la variante elegida, los precios oscilan entre 135.000 libras (155.700 euros) y 184.500 libras (212.800 euros). Ojo, son precios sin IVA. Las primeras entregas están previstas para agosto de 2023, cuando se cumpla el 40º aniversario del Land Rover Defender 110.