Se acabó la espera: tras cinco años de desarrollo y test varios, el Rimac Nevera ha comenzado su producción oficialmente. Las primeras unidades destinadas a clientes ya se están ensamblando.
Este estratosférico hiperdeportivo eléctrico que roza los 2.000 CV contará con una producción limitada 150 unidades, de las cuales, las fijadas para el primer año de ensamblaje ya tienen dueño.
Cada uno de los Rimac Nevera arranca en un precio de 2 millones de euros y la marca señala que, por año, se fabricarán 50 unidades.
Amplia personalización: cada unidad de este extraterrestre eléctrico promete ser única
Cinco semanas: eso es lo que tarda en ensamblarse cada uno de los Rimac Nevera. Y la firma croata asume la fabricación de todos sus componentes, tanto la mecánica como las baterías, sus sistemas electrónico y toda su tecnología. Muchos de estos elementos se conciben meses antes de ensamblar las unidades.
Las credenciales del Nevera fueron reveladas hace ya un año, y para llegar aquí se ha contado con 18 prototipos que se han sometido a 45 pruebas físicas y de choque, donde se han estampado hasta nueve de estas unidades. El desarrollo total ha llevado cerca de 1,6 millones de horas y su tren motriz ha tenido hasta tres versiones diferentes.
En realidad la primera unidad del Nevera se concibió hace unos días y lució palmito en el Festival de Velocidad de Goodwood 2022. La carrocería fue acabada en verde Callisto Green, con llantas en Graphite Vertex e interior beige Sand de Alcantara.
Rimac presume de que cada unidad del Nevera será única. Para ello ofrecen 36 tonalidades de pintura exterior que se pueden ajustar a medida y tres niveles de fibra de carbono expuesta incluyendo una carrocería totalmente en fibra de carbono vista.
Para el interior también cuenta con opciones en cuero y Alcántara de diferentes tonalidades, así como una amplia variedad de molduras.
Así es el Rimac Nevera
El Rimac Nevera está concebido con un monocasco de fibra de carbono con el techo adherido y un bastidor auxiliar trasero de carbono. Toda esta arquitectura pesa 200 kg, que sumado al resto de ingredientes le hace parar la báscula en 2.150 kg, siendo su reparto de pesos de 48:52.
En el menú encontramos varios elementos de aerodinámica activa que le permiten adaptarse a diferentes situaciones, pudiendo variar entre el modo "Low Drag", que reduce el coeficiente de arrastre a 0,30, y el "High Downforce", que aumenta la carga aerodinámica nada menos que un 326%.
Cuatro motores eléctricos dan vida al Nevera, uno por rueda, que en conjunto firman unos estratosféricos 1.914 CV y los 2.360 Nm de par. Y va dotado del avanzado All-Wheel Torque Vectoring 2 (R-AWTV 2).
Con estos ingredientes promete hacer el 0-96 km/h en 1,85 segundos y tarda en llegar a los 300 km/h en solo 9,0 segundos. Su punta se fija en 412 km/h. Aunque esta bestia de Rimac ya ha mostrado ampliamente sus credenciales: por ejemplo le hemos visto humillar a todo un Ferrari SF90 Stradale.
En lo que toca a la batería, desarrollada por la firma croata, tiene forma de H y va refrigerada por líquido, teniendo 120 kWh de capacidad gracias a las 6.960 celdas que la componen. Rimac promete hasta 550 km de autonomía.
Pero además, se destaca por un potente sistema de carga capaz de insuflar energía a una potencia de 500 kW en corriente continua. Si bien no hay punto de carga que ofrezca semejante cifra, al Nevera lo hemos visto cargarse en un poste de Ionity llegando hasta los 333 kW, pues algunos cargan hasta 350 kW.
Y es que esos anunciados 500 kW son más pensados a futuro y en consiguientes actualizaciones, para que no pierda comba en los próximos años. Ya iniciada oficialmente su producción, los primeros en encargar este hiperdeportivo eléctrico lo tendrán pronto y podrán disfrutar de sus bondades.