Probamos el Honda CR-V 2018, que llega a España con el 1.5 Turbo del Civic y siete plazas

Cuatro generaciones, 60.000 unidades vendidas desde su lanzamiento en 1997. El segmento D-SUV no para de crecer y ya supone una cuota del 23 % del mercado; de ahí que sea importante para las marcas seguir actualizando sus superventas. Es el caso del Honda CR-V 2018, que incluye, por primera vez, la opción de siete asientos en las versiones de gasolina con tracción 4x4.

Llegará a España en octubre de 2018 con el motor gasolina VTEC Turbo de 1,5 litros, empleado por primera vez en el último modelo de Honda Civic. ¿Su precio? A partir de 29.900 euros.

Objetivo: competir con las marcas premium

El Honda CR-V, que responde a las siglas 'Comfortable Runabout Vehicle', se ha rediseñado moderadamente para competir con las marcas premium del mercado. Entre sus rivales podríamos hablar de Mazda CX-5, Kia Sportage, Volkswagen Tiguan o Mitsubishi Eclipse Cross.

En las novedades en diseño exterior encontramos unos pasos de rueda más anchos y aumento de la distancia entre ejes en 33 mm. En la parte delantera integra la última versión del distintivo frontal de Honda, sus característicos faros y parrilla 'solid wing' e iluminación LED de serie.

Estas son sus medidas:

A pesar del incremento en la distancia libre al suelo de 35 mm, el centro de gravedad del nuevo CR-V se mantiene idéntico al de su predecesor.

El peso bruto varía entre los modelos de cinco asientos y los de siete y según la tracción. El tracción delantera se sitúa entre 1.501 - 1.523 kg mientras que el tracción total de 5 asientos tiene un peso de 1.573 - 1.642 kg. Por su parte el tracción total de 5 asientos baila entre los 1.598 - 1.667 kg y el tracción 4x4 de 7 asientos tiene un peso de 1.665 - 1.705 kg.

En cuanto al espacio de carga, el modelo de cinco plazas con los asientos abatidos tiene 1.756 l (1.638 con techo panorámico), mientras que la capacidad del de siete plazas con las tres filas abatidas está aún por confirmar. Sí han comunicado la capacidad del siete plazas con la tercera fila abatida: 472 l.

Las versiones más equipadas ofrecen un portón trasero eléctrico manos libres con una función que permite establecer la altura deseada.

Interiores cómodos y tecnología correcta

En cuanto al espacio interior, el CR-V cinco plazas es muy cómodo y amplio tanto en las plazas delanteras como en las traseras: se ha aumentado el espacio para las piernas de los pasajeros de las plazas delanteras elevando las partes más bajas del salpicadero. Los materiales son agradables al tacto, no demasiado plásticos y los asientos, calefactables, cuentan con soporte lumbar de cuatro puntos.

La consola central con tres modos configurables permite guardar dispositivos electrónicos del tamaño de un portátil y la cabina cuenta con cuatro puertos de carga USB.

En cuanto al modelo de siete plazas, que mide lo mismo que el cinco plazas, ocurre lo habitual: no es demasiado cómodo para siete adultos aunque la segunda fila se desplace hacia adelante y espacio de carga que queda es insuficiente para un viaje.

Honda ha racionalizado el diseño de la pantalla en comparación con el CR-V de la generación anterior, y ahora sólo cuenta con una pantalla táctil central, además de la interfaz de información para el conductor de 7 pulgadas que puede verse a través del volante.

En el apartado tecnología encontramos como novedad la integración con Apple CarPlay además de Android Auto.

Tecnologías de seguridad

Las características de seguridad pasiva del CR-V 2018 se complementan con el paquete de tecnologías de asistencia a la conducción y seguridad activa Honda Sensing de serie en todas las versiones, e incluye:

• Sistema de prevención y mitigación de impactos.
• Avisador de colisión frontal.
• Sistema de aviso de salida de carril.
• Sistema de aviso y prevención de cambio involuntario de carril.
• Control de crucero adaptativo.
• Sistema de reconocimiento de señales de tráfico.
• Sistema de asistencia inteligente de velocidad.
• Control de crucero adaptativo inteligente.
• Sistema de información de ángulos muertos.
• Sistema de alerta de tráfico cruzado.
• Cámara de visión trasera de varios ángulos.

Sin versiones diésel en Europa y cambio CVT mejorado

El nuevo CR-V incorpora el motor de gasolina VTEC Turbo de 1,5 litros que ya vimos en el útimo Civic, con opción de dos transmisiones -6MT o CVT- y de tracción delantera o total. Ya sabíamos que el SUV no tendría versiones diésel en Europa; a cambio tendremos la versión híbrida a lo largo de 2018.

La potencia del motor VTEC Turbo es de 173 CV a 5.600 rpm con la transmisión manual de seis velocidades y de 193 CV a 5.600 rpm para las versiones con transmisión CVT.

La aceleración de 0 a 100 km/h se logra en 9,3 segundos, con una velocidad máxima de 210 km/h.

También hay cambios en la transmisión automática CVT; la respuesta que ofrece es de características similares a las que se experimenta con las transmisiones automáticas de doble embrague.

A la hora de conducir resulta bastante cómodo; está bien aislado, tiene buena respuesta en adelantamientos, una posición de conducción cómoda y el servofreno eléctrico demostró una muy buena respuesta en el momento de clavar el freno ante una incorporación inesperada en autovía.

Por desgracia no pudimos probar las capacidades todoterreno del CR-V, pero si pudimos comprobar cómo el sistema AWD se desconecta automáticamente cuando no se necesita par en las ruedas traseras, a fin de mejorar el rendimiento.

Por el momento no se han desvelado los precios oficiales según nivel de equipamiento pero sí sabemos que partirá de los 29.900 euros y que llegará en octubre a España con motores gasolina. Desde Honda observan con preocupación el declive del diésel, por ello para 2025 la firma nipona quiere tener dos tercios de sus motores híbridos o eléctricos.

Veremos qué escenarios nos depara el futuro.

Los gastos del viaje para esta presentación han sido asumidos por la marca. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.