El Audi A1 quattro no es solo un A1 sobrealimentado y aderezado para llamar la atención. En él hay hasta 600 piezas que no son comunes con el resto de los A1, lo cual nos indica que se trata de un coche con desarrollo completamente independiente.
Podemos considerarlo como el coche más exclusivo desarrollado por quattro GmbH junto a los R8 GT, así que debería cumplir con las expectativas que despierta su llamativo aspecto físico. No puedo aguantar más, toca acelerar a fondo y tratar de impregnaros con las sensaciones que me ha transmitido.
Moverte por la ciudad en el Audi A1 quattro es una tarea curiosa. Si del Audi R8 V10 S-Tronic decía que era uno de los coches más llamativos que he conducido en mi vida, el A1 quattro no se queda atrás. Tendrás que acostumbrarte a que todo el mundo te mire, y no precisamente con cara de admiración en muchos casos.
Por lo demás, sus reducidas dimensiones unidas a una dirección muy directa lo hacen bastante juguetón entre los coches. En ese sentido poco se diferencia de un A1 normal y corriente, es un coche muy práctico para el día a día.
En lo que si noté desde un comienzo diferencias respecto al A1 normal, es en la respuesta del motor. El turbo tiene bastante retardo desde que pisas el acelerador hasta que empiezas a obtener la respuesta necesaria, algo que imagino estará hecho a propósito para evocar los Audi quattro del pasado.
He probado este mismo motor en otros coches y la entrega de potencia era mucho más inmediata que en este coche. Los 350 Nm de par parecen quedarse escasos cuando aceleras desde parado debido a ese retardo en el funcionamiento del turbo, pero hay que esperar hasta las 3.000 revoluciones para tener lo que esperábamos. Todo me indica que han forzado el retardo de los turbo de antaño.
Es a partir de ese régimen cuando el Audi A1 quattro comienza a comportarse de forma realmente deportiva, cuando te pega al asiento y cuando te permite dejar atrás a esos coches que salían a tu lado en el anterior semáforo.
En ese momento deberás estar bien atento a la mano derecha y a la palanca de cambios, para ir engranando una marcha detrás de otra. El funcionamiento de la caja de cambios es excelente y sus relaciones son bastante cortas en las marchas iniciales, y tal vez un poco cortas también en las marchas largas.
Los movimientos de la palanca son cortos, preciosos y rápidos. Si te gustan los coches con cambio deportivo, con este no echarás en falta un DSG de doble embrague. Al menos yo me lo he pasado en grande jugando constantemente con el cambio.
El Audi A1 quattro acelera de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 245 km/h. Son cifras buenas para un coche de su tamaño, aunque con 256 caballos de potencia y siendo el coche más potente de su segmento, tampoco destacan como deberían.
En parte creo que su mayor handicap es el peso, un tanto excesivo para mi gusto. Pesa casi 1.500 kilos, lo cual supone aproximadamente 200 kilos más que el A1 1.4 TFSI de 185 caballos. Hay varios motivos por los que está pasado de kilos. Por un lado lo achaco al sistema de tracción a las cuatro ruedas y por otro lado al completo equipamiento de serie.
Pero a pesar de ese peso excesivo, me atrevo a decir que el Audi A1 quattro es uno de los coches más efectivos de su segmento a la hora de trazar curvas una detrás de otra. Las suspensiones son muy duras y los neumáticos tienen un perfil mínimo. Esto unido a las mínimas derivas de la carrocería le confiere un aplomo excelente en curvas.
A la hora de enlazar curvas medias y lentas, el A1 quattro marca diferencias frente a sus principales rivales. Mientras el resto son tracción delantera y en la mayoría de los casos necesitan tener las ruedas completamente rectas a la salida de las curvas para poder entregar la potencia, en este todo es diferente.
Puedes pisar a fondo justo después del vértice de la curva, en pleno apoyo y tienes la tracción necesaria para salir hacia delante con la fuerza de los 256 caballos retardados. Siempre tienes tracción y además es una tracción muy neutra, que te anima a pisar el acelerador dónde en otros coches simplemente lo estarías acariciando para evitar el temido subviraje a la salida de las curvas.
Como buen quattro es un coche muy rápido en curvas, una de las máquinas más efectivas que puedes conducir en un tramo de montaña lento. Va pegado al suelo como si fuese sobre raíles, pero eso también le resta algo de diversión.
Por citar un potencial rival, un Clio Sport se mueve el triple que este, es infinitamente más nervioso. A veces hace falta movimiento para pasártelo bien al volante. El Audi A1 quattro es muy efectivo, cuesta sacarlo de sus casillas y cuando lo haces es porque ya no puedes seguir con tonterías. Pero esa efectividad le resta algo de diversión.
Durante la prueba, la lluvia hizo acto de presencia en varias ocasiones. Una de ellas fue durante una ruta de curvas, en las que el asfalto no daba precisamente mucha confianza. Ahí fue dónde me demostró que en esas condiciones, es capaz de ofrecer tracción incluso en esos momentos en los que sientes miedo al pisar el acelerador.
A la salida de las curvas lentas en marchas cortas, la tracción era siempre perfecta. No noté en ningún momento que las ruedas delanteras patinasen salvo que a propósito forzase la pérdida de tracción, pero lo que si sentí en varias ocasiones fue que las traseras traccionaban.
El coche da mucha confianza, y a medida que te vas haciendo a él y vas comprobando que los límites están en un nivel superior al resto de modelos de su segmento, vas apurando más y más tanto las frenadas como las aceleraciones para salir de las curvas.
Ambas cosas combinadas y unidas a un motor muy potente, hacen de él uno de los coches más efectivos que he conducido por una carretera serpenteante en los últimos años. Además lo mejor que tiene es que la conducción deportiva y rápida está al alcance de cualquiera, no solo de las manos más expertas.
Sonido turbo de hoy en día
En los motores turbo, uno de los detalles que transmiten más sensaciones deportivas es el sonido. Los turbo soplan o silban, y en el caso del Audi A1 quattro lo que escuchas cuando el turbo está funcionando a pleno régimen es una especie de soplido grave en la parte posterior del coche.
Me recordó mucho al soplido que emite el Renault Mégane R.S. y además es un sonido más palpable en el interior que en el exterior. Personalmente prefiero el silbido de los turbo clásicos, pero admito que pronto acabé teniendo cierta adicción a pisar a fondo para escucharlo. ¿O era para sentir el retado del turbo? Cosas de las sensaciones enfrentadas.
No creo que nadie que se gaste los 53.600 euros que costaba el Audi A1 quattro se preocupe por los consumos demasiado. Están comprando un coche exclusivo y una pieza de colección, así que hay que darle de beber 98 octanos y si es posible, más.
Los consumos si vas al ritmo que te pide el cuerpo, pasan fácilmente de los 13 l/100 km de media, que aunque no se trata de una cifra exagerada para sus prestaciones, si que es un consumo alto para ser un utilitario deportivo.
Pero la parte buena viene en el uso diario, dónde no eres capaz de estar todo el tiempo exprimiendo el motor y por tanto los consumos bajan rápidamente de 10 l/100 km sin problema.
Valoración general
El Audi A1 quattro es una pieza de colección muy limitada, un coche que independientemente de lo bien o mal que vaya, con el paso del tiempo se cotizará y su valor se mantendrá estable si lo comparamos con otros Audi.
En quattro GmbH han conseguido hacer un coche muy efectivo en conducción deportiva, una máquina capaz de marcar tiempos increíbles en un tramo de montaña. Solo le reprocho un peso un tanto excesivo, pero eso es marca de la casa. Por lo demás, es un juguete excelente para pasarlo bien al volante. Creo que toda la producción está ya vendida, así que si quieres uno tendrás que buscar en el mercado de segunda mano.
En pocas palabras
A1 quattro
- A favor: exclusividad, comportamiento deportivo, aspecto exterior, equipamiento completo, inversión a futuro.
- En contra: peso elevado, relación eficacia/diversión, maletero pequeño.
- Puntuación final: 8/10
Ficha técnica
A1 quattro
- Cilindrada: 1.984 cm³
- Motor: 4 cilindros transversales (256 CV)
- Par máximo: 350 Nm CEE entre las 2.500 y 4.500 RPM
- Peso en vacío: 1.390 kg.
- Velocidad máxima: 245 km/h
- Aceleración de 0 a 100 km/h: 5,7 s
- Transmisión: Manual de 6 velocidades
- Consumo urbano: 10 l/100 km
- Consumo extraurbano: 7,8 l/100 km
- Consumo mixto: 8,5 l/100 km
- Combustible: Gasolina
- Capacidad del maletero: 210 litros
Precio del Audi A1 quattro
Versión probada
- Audi A1 quattro: 53.600 €
El coche para esta prueba ha sido prestado por Audi. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.
Fotografía | Héctor Ares En Motorpasión | Audi A1 quattro, miniprueba (parte 1)