Segundo varapalo que se lleva en cuestión de semana la nueva categoría de los hiperdeportivos en el WEC. Si hace unos días fue el equipo Rebellion quien anunció que se retiraba de la competición, ahora ha sido Aston Martin quien ha paralizado su proyecto de cara a esta temporada 2020/2021, que está a punto de comenzar.
Aston Martin era, junto a Toyota, el buque insignia de la categoría. Las dos marcas estaban llamadas a luchar entre sí por el título en la primera temporada, a expensas de que se fuesen incorporando más fabricantes. Pero este impás de Aston Martin pone en jaque toda la competición antes incluso de que empiece.
La llegada de Lawrence Stroll hace que la compañía vire hacia la Fórmula 1
La de Aston Martin no es una retirada definitiva en todo caso. Simplemente han decidido pausar el proyecto para valorar mejor si quieren participar en la categoría. Muy probablemente tenga que ver con el cambio de dueño de la compañía. Ahora el canadiense Lawrence Stroll está al mando, y ya sabemos que su gran apuesta es la Fórmula 1.
Además, desde Aston Martin se explica que la unión de reglamentos entre ASO e IMSA es lo que les hace estudiar mejor si les conviene el proyecto o no. Desde la compañía afirman que estudiarán con ambas organizaciones "un camino adecuado para cualquier participación futura". Pero, de momento, Aston Martin solo llevará a Le Mans su Vantage GTE.
"Con este cambio que sucederá en la competición, la decisión de pausar nuestra participación en el WEC de los hiperdeportivos nos da tiempo y espacio para respirar y estudiar con tranquilidad el estado del nivel deportivo más alto y nuestro lugar en él. Competir contra nuestros rivales más cercanos en GT tiene sentido", reza el comunicado de Aston Martin.
A nadie se le escapa que la llegada de Stroll al frente de Aston Martin ha supuesto un giro radical en la política deportiva de la compañía. Ahora los ojos se ponen en la Fórmula 1, donde Aston Martin correrá a partir de 2021 ocupando la plaza de Racing Point. Algo que, por cierto, ya ha anunciado oficialmente la marca.
Así pues Toyota queda como la única marca implicada en el WEC de los hiperdeportivos de cara a la temporada 2020/2021. Peugeot mantiene en pie su proyecto, de momento, pero ya sería para 2022, mientras que lo de Aston Martin sigue en el aire. Otros fabricantes, como Ferrari, McLaren o Audi, se dejan querer, pero son pájaros en el aire.
Watch as the Bulls jump behind the wheel of the @astonmartin Valkyrie for the very first time at Silverstone! 👊
— Aston Martin Red Bull Racing (@redbullracing) February 18, 2020
Ante todo esto, ya han surgido rumores que apuntan a que ASO podría retrasar al menos un año la entrada de los hiperdeportivos, y mantiener el estatus de los LMP1 una temporada más. El WEC no quiere quemar el formato con otro triunfo aplastante de Toyota en el primer año, pese a que coche más pequeños como el de Glickenhaus o el t.50 de Gordon Murray le intentarían plantar cara.
Max Verstappen estuvo probando el Valkyrie en Silverstone
Precisamente a la par que se producía este anuncio, los dos pilotos de Fórmula 1 que ahora mismo están relacionados con Aston Martin probaban el Valkyrie en Silverstone. Se trata de Max Verstappen y Alexander Albon, los pilotos del equipo Red Bull, el cual mantendrá hasta final de año su acuerdo de colaboración con Aston Martin.
La inminente entrada de Aston Martin como equipo propio en la Fórmula 1 ha roto el acuerdo de colaboración que tenía la marca con Red Bull, pero al menos el Valkyrie se ha salvado y continuará su desarrollo. En otros tiempos, se llegó a hablar de que sería Verstappen quien pilotase para Aston Martin en Le Mans. Era antes de que la llegada de Stroll lo cambiase todo.
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