El pasado mes de diciembre ha cerrado el 2021 como un año de coches más caros, tanto en el mercado de automóviles nuevos como en el de segunda mano. Así se desprende de los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística, que refleja para los primeros un incremento en sus precios del 3% en comparación con el mismo periodo de 2020.
De este modo -y calculando a partir de las cifras publicadas por Coches.com y ANFAC-, su precio medio se ha elevado en 2021 hasta los 25.520 euros, por encima de los 24.754 del año anterior. Estos precios corresponden a turismos de segmentos generalistas, excluyendo marcas y modelos de gran lujo.
El aumento viene motivado por la combinación de varios factores como la falta de stock en los concesionarios o la crisis de materiales semiconductores, la cual ha ralentizado notablemente la producción de todos los fabricantes.
Ante dichos problemas, muchos compradores han optado por la alternativa de acudir al mercado de ocasión. En este último, los datos recientemente ofrecidos por la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos revelan un incremento de los precios de un 14,3% con respecto a 2020.
Varias crisis interconectadas: stock, componentes y logística
La escasez de unidades disponibles en los concesionarios es una de las principales causas de estos incrementos. Pero a su vez, es un problema alimentado por otros como la actual crisis de componentes -especialmente electrónicos- que sufre la industria automotriz.
Y es que el parón de las fábricas a principios de 2020 obligó a proveedores de semiconductores como Intel o Qualcomm a reorientar hacia otros sectores los volúmenes de su producción que dedicaban a la automoción. El hardware fue el gran beneficiado, impulsado por el crecimiento de la minería de Bitcoin y otras criptomonedas.
El regreso a la actividad de los constructores a mediados de ese año provocó un atasco en la demanda que aún está por resolver. Perdida su posición como clientela prioritaria muchas marcas se vieron obligadas en 2021 a entregar vehículos incompletos, con la promesa de reequipar los sistemas faltantes una vez se normalizara el suministro de chips.
Pero lejos de solventarse la situación ha desembocado en un aumento de los retrasos en esas entregas, especialmente perceptible desde el pasado verano. Según un reciente estudio encargado por Sumauto el plazo medio se ha triplicado, pasando de cuatro semanas a unos 87 días. En consecuencia, el sector de los concesionarios -en números recabados por Faconauto- ha cerrado el 2021 con 250.000 pedidos pendientes.
Otro factor que encarecerá aún más los precios en 2022 será la entrada definitiva en vigor del actualizado Impuesto de Matriculación. Éste establece nuevos tramos estipulados por la Unión Europea en función de las emisiones de CO2, homologadas para cada vehículo según el protocolo WLTP.
El texto fue aprobado por el Ejecutivo en 2018, pero con motivo de la crisis del Covid se pospuso su aplicación hasta este año. Los fabricantes calculan que sólo un 7% de los modelos a la venta estarán exentos gracias a emitir menos de 120 gramos de CO2 por kilómetro recorrido. El resto, deberán abonar un recargo promedio entre los 800 y los 1.000 euros.
Por último, el precio del petróleo y la escasez de contenedores ha encarecido notablemente los fletes de mercancías por mar. Un problema logístico mundial que ha afectado especialmente a marcas sin fábricas en Europa como Mazda, Subaru, Mitsubishi o Mahindra. Mientras, otras con mejor posición -como VW o Volvo- han optado por el tren como alternativa.
El coche de ocasión como salvavidas
Por todo lo anterior, quien necesitaba comprar un coche con la menor demora posible ha terminado recurriendo al mercado de ocasión. Esto se ha dejado notar en el aumento de los precios que Ancove sitúa en un 11,4% con respecto a 2020. Es decir, que un coche que entonces podría costar de media unos 10.554 euros ahora estaría disponible por 11.912 euros.
Por comunidades autónomas los más caros están en la Comunidad de Madrid, donde el precio medio asciende a 13.902 euros. Le siguen Castilla-La Mancha y La Rioja, con 12.234 y 12.171 euros de media, respectivamente. En la otra cara de la moneda, los más baratos están en las Islas Canarias donde el precio medio se sitúa en los 10.050 euros.
Sin embargo, lo que más preocupa al sector es el triunfo de los coches más antiguos. Según Ancove, de los 203.527 turismos de segunda mano vendidos en 2021 un 62,7% tenía más de ocho años. Este dato evidencia una alta demanda -motivada por la situación económica general- que también ha repercutido en su precio medio, el cual aumenta en un 16,2% hasta los 9.023 euros.
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