General Motors está intentando acordar con los gobiernos de Alemania y Suecia un plan de ayudas para Opel y Saab, respectivamente. La presencia de las fábricas en los países donde estas dos históricas marcas nacieron hace que los gobiernos vean necesario intervenir para evitar el cierre de sus fábricas.
Sin embargo, ¿cómo pueden saber estos gobiernos que el dinero se quedará en sus países y no se irá a Estados Unidos? La solución pasaría porque las marcas fuesen independientes, es decir, se produjese una escisión total o parcial de la empresa matriz, General Motors.
Nuestros compañeros de El blog salmón definen un posible escenario: Opel con participaciones gubernamentales, a modo de accionistas, una solución que podríamos ver no sólo en General Motors sino en otras muchas empresas de automóviles o de otros campos.
No parecen soluciones fáciles, pero las que se tomen probablemente sean las mejores a largo plazo. Y en todo caso, tratándose de marcas grandes y con un largo historial, todos estos cambios deberían de ser transparentes para el usuario final.
Fuentes | Automotive News
Más información | El blog salmón
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