Tras cuatro años en el mercado y más de un millón de unidades vendidas, al Volkswagen T-Roc le ha tocado pasar por la casilla restyling. El nuevo T-Roc estrena faros de alta tecnología, un nuevo sistema multimedia y, según la marca, nuevos materiales de mejor calidad a bordo.
Situado en el corazón de la oferta SUV de Volkswagen, entre el T-Cross y el Tiguan, el T-Roc, lanzado a finales de 2017, llega a la mitad de su vida comercial. La marca alemana ya ha vendido más de un millón de ellos en todo el mundo, 650.000 en Europa y 320.000 en China. También se vende en Sudáfrica, Australia y Japón. Es todo un éxito. Y si funciona, los cambios no pueden ser radicales.
Así, para seguir sobre la senda del éxito, el Volkswagen T-Roc estrena pequeñas actualizaciones y corrige algunas de los puntos más criticados. Estos cambios se aplican a toda la gama Volkswagen T-Roc, incluyendo el T-Roc R de 300 CV y el T-Roc Cabrio, el único descapotable de cuatro plazas del mercado que no es un coche de lujo.
Los cambios estéticos no son tan evidentes como ocurrió con el Tiguan que heredó de unos faros a lo Volkswagen Golf. El T-Roc mantiene el mismo esquema para sus faros, pero adopta la tecnología LED matricial con 24 fuentes de luz por faro y una nueva firma lumínica. La principal diferencia es la presencia de una franja luminosa que une los faros por la parte inferior y atraviesa la calandra.
En la zaga, los pilotos traseros lucen una nueva estructura gráfica e intermitentes dinámicos. El T-Roc aprovecha el restyling para proponer cinco nuevos colores de pintura exterior y llantas de aleación de 17 y 19 pulgadas de nuevo diseño.
Un nuevo salpicadero que pone a la pantalla multimedia en un altar
A bordo, el renovado Volkswagen T-Roc estrena salpicadero (aunque la base es la misma que en el modelo saliente). Y, siguiendo la tendencia actual, se llena de pantallas. La instrumentación es ahora digital en una pantalla de 8 pulgadas, que pasa a ser de 10,25 pulgadas en los acabados superiores.
Mientras que por su parte la pantalla táctil del sistema multimedia, que puede ser de hasta 9,2 pulgadas, se sitúa ahora en lo alto del salpicadero cual tableta sobre un pedestal. Por otra parte, se han ampliado las salidas de aire centrales, mientras que el paquete tecnológico incluye ahora los servicios inalámbricos We Connect Plus, Apple CarPlay y Android Auto.
Otro cambio a bordo es la nueva interfaz del aire acondicionado. Los tradicionales botones físicos han sido sustituidos por cursores táctiles. Es básicamente el mismo módulo que vemos en los actuales Volkswagen Tiguan y SEAT Tarraco, por ejemplo.
Del Tiguan, el T-Roc recupera también el volante multifunción con almohadillas táctiles en lugar de botones físicos. En ambos casos, por haberlos experimentado en el Tiguan, sí queda más bonito o más depurado pero no es necesariamente más práctico.
Una de las mayores críticas que le hemos hecho al T-Roc es la escasa calidad percibida de los materiales del habitáculo. En Volkswagen quieren remediarlo con la presencia de molduras de tela en las puertas y, en los acabados Style y R-Line, los guarnecidos de las puertas y los reposabrazos son de polipiel y presentan costuras de diseño, al igual que los reposacabezas.
Los asientos deportivos del T-Roc R, así como la tapicería de cuero Nappa, están disponibles como opción en el acabado R-Line. Queda por ver, en una futura prueba, la calidad de los plásticos utilizados.
Una gama de motores sin versión híbrida
La gama de motores del nuevo Volkswagen T-Roc no experimenta cambios. Tres son los motores de gasolina que lo pueden equipar: el 3 cilindros turbo 1.0 TSI de 110 CV, el 4 cilindros 1.5 TSI de 150 CV y el de 2.0 TSI de 190 CV. En diésel, el motor 2.0 TDI está disponible en versiones de 115 y 150 CV.
Por último, el turbulento Volkswagen T-Roc R sigue impulsado por el 2.0 TSI de 300 CV y 400 Nm para un 0-100 km/h en 4,9 segundos.
Así, curiosamente y al menos de momento, Volkswagen no contempla una motorización híbrida para el T-Roc. Es uno de los pocos modelos de su segmento que no ofrece esa posibilidad. A destacar que la tracción integral 4Motion (un sistema de tipo Haldex) es de serie en las motorizaciones TDI 150, TSI 190 y T-Roc R.
La gama del T-Roc cuenta con cuatro acabados, el T-Roc -de base-, el Life, Style y R-Line. El acabado Style cuenta con pintura bicolor, elementos cromados adicionales, iluminación ambiental y asientos Confort en el interior. El diseño exterior y el equipamiento R-Line recuerdan todavía más al T-Roc R (parachoques, volante deportivo, asientos deportivos en opción).
Por otra parte, el T-Roc cuenta con el pack de diseño Black Style, en combinación con los acabados Style y R-Line, que sustituye los elementos cromados por elementos de de color negro.
Los nuevos T-Roc, T-Roc R y T-Roc Cabrio llegarán a lo largo de la primavera de 2022.
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