Puede que este Nissan Skyline GT-R V-Spec tenga ya 20 años a sus espaldas, pero incluso hoy en día sigue una máquina que pondría en apuros a más de un deportivo. En este vídeo de Best MOTORING, Motoharu Kurosawa se pone al volante del Skyline GT-R V-Spec para marcarse un tiempo de 8:01.72 en la bucle norte del Nürburgring.
Es verdad que cualquier GT-R actual, o incluso un compacto con un piloto profesional a bordo, podría superar al R33 V-Spec en el Nordschleife. Sin embargo, viendo cómo Kurosawa-san usa todo el ancho de la pista disponible (que no es mucho) y a pesar de la tracción integral se marca más de un contravolantazo para contrarrestar una trasera desobediente, nos hace pensar que el GT-R no es la súper máquina que lo hace todo sin que el piloto tenga que intervenir. También es una máquina que requiere un cierto conocimiento y algo de destreza para sacarle partido.
No hace falta presentar el Nissan Skyline GT-R R33, sin duda uno de los más aclamados por el público y con las versiones especiales más radicales y exclusivas que puedas imaginar. Más allá del ultra raro GT-R LM y del exclusivo 400R, el Skyline GT-R V-Spec es el máximo exponente de lo que era el Skyline GT-R.
El Skyline R33 GT-R V-Spec llegó al mercado en 1995, al mismo tiempo que el GT-R "básico". El V-Spec se caracteriza por una suspensión más deportiva y la última evolución del conplejo y avanzado sistema de tracción integral ATTESA E-TS Pro, que incluye un diferencial trasero de deslizamiento limitado activo controlado por ordenador. Fue también, el primer GT-R en equipar un ABS de cuatro canales independientes, uno para cada rueda.
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