1974: Mercedes-Benz presenta en Ginebra su buque insignia, el 450 SEL 6.9 (serie W116). Un poderoso motor V8 con 286 CV de potencia y 549 Nm de par propulsaba este prodigio de la ingeniería alemana. Se vendió entre 1976 y 1981 en números muy reducidos, no hay ni 8.000 unidades producidas.
El preparador Lorinser sugiere una discreta actualización estética, sin estropear el espíritu del mítico 450 SEL. La mecánica permanece inalterada, sigue con su ineficiente caja de cambios automática por convertidor de par de tres relaciones. Los paragolpes delanteros tienen un relieve menor y se le han retirado las típicas defensas metálicas de la época.
Los neumáticos, que no son lo más apropiado para lidiar con semejante par, reciben unas llantas BBS de diseño retro para que no pierda encanto. En el interior tan sólo se percibe la personalización por el volante de Lorinser y las chinas que no han quitado de la alfombrilla. Como se aprecia, es una preparación con mucho respecto respeto.
Esta preparación tendrá muy pocos clientes, total, los cambios son mínimos y supone meter mano a todo un clásico y una de las mejores berlinas de alta potencia de los últimos tiempos.
De todas formas, ahi va un dato curioso, el V6 TDI del Porsche Cayenne Diesel tiene unas cifras muy parecidas de potencia y par, aunque claro, en términos de consumo hay un mundo de diferencia, entre otras cosas. ¿Qué potencia le podrían sacar a semejante bloque de casi 7 litros? Da miedito pensarlo.
Por mucho que parezca un modelo viejuno a ojos de las nuevas generaciones el 450 SEL tenía algunas tecnologías muy revolucionarias para su tiempo, como inyección electromecánica Bosch, frenos ABS en opción y una suspensión hidroneumática parecida a la de Citroën.
Su rendimiento por litro no se puede comparar con un coche actual, pero el abuelo podía coger más de 225 km/h. Hacía el 0-100 km/h en 7,5 segundos y pesaba casi dos toneladas. La versión que se vendió en Estados Unidos daba una cifras de potencia un poco peores por temas de emisiones. Según la norma DIN 70030 el 450 SEL 6.9 sólo gastaba 16 l/100 km.
En la actualidad, el Mercedes-Benz S 400 BlueHYBRID consigue 279 CV de potencia con su motor térmico 3.5 V6 (la mitad de cilindrada) y un extra de 20 CV con el motor eléctrico. El híbrido supera por muy poco las prestaciones brutas del 450 SEL, pero claro, consume la mitad.
Fuente | Lorinser