¿Te suena? Lo que ves sobre estas líneas es el GMA T.50 y, sí, tiene unos cuantos paralelismos con uno de los coches más icónicos de todos los tiempos. Es la última creación del genio Gordon Murray y es ya por derecho propio uno de los superdeportivos más esperados de los últimos años.
Diseñado para ser extremadamente rápido, el GMA T.50 es una máquina que promete unas prestaciones casi irreales con un peso inferior a una tonelada, aerodinámica activa y un motor de aspiración natural V12 firmado por Cosworth.
GMA T.50: el supercoche definitivo de Gordon Murray
El GMA T.50 es obra de uno de los cerebros más prolíficos de la automoción y del automilismo. Gordon Murray tiene hoy 74 años y en su haber firguran algunos de los monoplazas de Fórmula 1 más exitosos de los años 70 y el soberbio McLaren F1 con el que rompió los esquemas establecidos para los coches deportivos de los años 90.
Después de un periodo de asueto, Murray ha vuelto con una premisa fundamental: solventar algunos de los errores y limitaciones que tuvieron a la hora de crear el F1. Para ello ha fundado una compañía independiente y ha diseñado cada elemento sin ningún tipo de acotación, pues la decisión final de cada pieza ha sido exclusivamente suya. En sus propias palabras han "mejorando al F1 en todos los aspectos concebibles".
Así ha nacido el GMA T.50, un coche en el que podemos encontrar rasgos similares con el McLaren F1, como un exterior con un diseño muy aerodinámico y un lenguaje parecido en el que destacan los dos grandes faros delanteros. Las líneas de la carrocería son limpias y puras y esconden "la aerodinámica más avanzada y efectiva jamás vista en un coche de calle".
El apartado aerodinámico incluye soluciones como un ventilador de 400 mm de diámetro que gira hasta 7.000 revoluciones situado en la parte trasera que acelera el aire que pasa bajo el coche para crear efecto suelo, admisión de aire al motor forzada a través de la presión de aire a alta velocidad que ayuda a generar 50 CV extra, dos alerones traseros activos y seis modos aerodinámicos: Auto, Braking, High Downforce, Streamline, V-Max y Test.
Las líneas suaves del T.50 se rompen de manera dramática cuando se abren las puertas con bisagras diédricas o la tapa doble del motor. En el interior del coche también hay guiños al F1, manteniendo la configuración de asiento central para el conductor y dos asientos para los pasajeros, uno a cada lado.
Igual que el exterior, el habitáculo es sencillo para centrarse exclusivamente en la conducción, pues este será un coche pensado para las sensaciones. Tanto es así que Murray ha optado por la utilización de un cambio manual, de ahí esa palanca de cambios tan simple pero apetecible que acciona una transmisión Xtrac de seis relaciones con un peso de 80,5 kg.
Pero el apartado mecánico tiene para mucho más porque la zaga esconde un motor que promete mucho. Es un bloque de 3.9 litros en configuración V12 de aspiración natural con una capacidad de giro de hasta 12.100 revoluciones por minuto y unas cifras de 672 CV y 467 Nm de par motor. Sí, no son cifras desbordantes, pero como decíamos antes será un coche de emociones, pero es que el peso del conjunto es de sólo 957 kg en seco (relación de 1,5 kg por CV) y 986 kg en orden de marcha.
Con sus 12.100 revoluciones, este motor será el bloque de calle con mayor régimen de giro jamás fabricado por encima incluso del Aston Martin Valkyrie, pero también tendrá la mayor potencia específica (166 CV por litro), será el V12 más ligero (178 kg) y prometen que tendrá el mejor sonido del mundo de la automoción. No, no hay rastro de hibridación.
Todo el GMA T.50 está construido a medida sobre un chasis monocasco de fibra de carbono sobre el que se ensambla una carrocería que también está realizada en el mismo material de alta resistencia. Toda la carrocería y el chasis pesan menos de 150 kg. El parabrisas es un 28% más fino de lo normal para ahorrar peso, mientras que el motor realiza una función semiestructural.
Las suspensiones recurren a elementos estructurales de aluminio forjado, la dirección es de piñón-cremallera y los frenos corren a cargo de brembo con discos carbocerámicos. Pero no todo es extremo en este T.50 porque también tiene concesiones al confort como un equipo de audio de 10 altavoces, compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay o un maletero con capacidad de 288 litros.
El GMA T.50 debería pisar las carreteras en manos de sus compradores en enero de 2022, con un precio unitario de 2,36 millones de libras (2,61 millones de euros) antes de impuestos por unidad, y tan solo se van a fabricar 100 unidades para todo el mundo.
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