
Los cambios de temperatura, las inclemencias del tiempo y el continuado paso de vehículos acaban por destrozar el firme de las carreteras. Su mantenimiento es por tanto esencial para que sean seguras. Lo que exige inversiones millonarias continuadas que no siempre se cumplen. A ello se añade que deben cortarse para realizar estas tareas, con el inconveniente que eso implica para los usuarios.
Una startup tecnológica recién llegada asegura que tiene la solución: acaba de lanzar un robot autónomo capaz de arreglar grietas y baches. Lo que puede hacer incansablemente 24/7, a diferencia de un operario humano. Pero eso también supone amenazar nuevos puestos de trabajo.
Un solo robot puede hacer el trabajo de seis trabajadores
Se trata de Pave Robotics, una firma estadounidense fundada en 2004. En solo un año ha desarrollado su robot Tracer. "Trabaja mientras usted duerme, ahorrándole tiempo y costes de mano de obra, a la vez que ofrece resultados de mayor calidad": así lo ofrece a empresas y administraciones.
Según detallan, este Tracer es capaz de detectar grietas y agujeros en el asfalto, y a la par sellarlas con un vertido caliente de "precisión submilimétrica". También puede realizar otras tareas, como la eliminación de escombros de la carretera. Dado que analiza el firme, permite además registrar datos en tiempo real sobre el estado de la carretera.
Si dar detalles sobre su autonomía, Pave Robotics, afirma que su robot Tracer puede trabajar sin descanso 24 horas al día siete días a la semana. Lo que a su vez permite realizar estas tareas más eficazmente que recurriendo a operarios. Y por ello reducir el tiempo en el que pasa una carretera cortada para las tareas de reparación.
¿Robots quitando el trabajo a las personas? A ello se añade el ahorro de costes: pues afirman es capaz de hacer la misma tarea que hasta seis trabajadores juntos. Algo que beneficia a empresas y administraciones, pero que aviva el debate de personas sustituidas por máquinas de inteligencia artificial.
🤖@pave_robotics is building Tracer, the first fully autonomous road worker. Tracer autonomously detects, cleans, and seals asphalt cracks cheaper, faster, and more efficiently than a human.https://t.co/jJbg9ZADeI
— Y Combinator (@ycombinator) February 15, 2025
Congrats on the launch, @JoshAKelly and @MLandonSmith! pic.twitter.com/QSj0RqALv3
Ya son varias las marcas de coches que valoran recurrir robots como operarios: la propia Tesla con su Optimus, así como el Figure 1 de BMW. Una unidad de este último ya se está probando en una planta de Carolina del Sur.
Los robots no se cansan: trabajan sin parar sin chistas hasta donde llega su batería. Tampoco claman por sus derechos y no exigen bajas médicas, esas que tan poco le gustan a Elon Musk.
Inversión siempre deficitaria. Mantener las carreteras exige grandes inversiones e incluso aunque se hagan resulta deficiente. Por ejemplo en EEUU se invierten anualmente cerca de 27.000 millones de dólares, y aún así el 42 % de las vías está en estado deficiente.
En España, la inversión en carreteras es un debe endémico. Según entidades como la Asociación de Empresas de Conservación y Explotación de Infraestructuras (Acex) se deberían destinar casi 5.000 millones de euros anuales para la conservación de las vías estatales, autonómicas y provinciales. Si bien es su negociado, el estado de muchas vías evidencia que la inversión debería ser mayor.
En 2024, con la mayor partida en los últimos 13 años, se invirtieron 10.000 millones de euros para cubrir la mejora de todas las infraestructuras de transporte, pero a repartir entre ferrocarril, marítimo y por carretera.
Imágenes | Pave Robotics