Durante las últimas semanas han circulado por la Red muchos rumores sobre el Porsche 911 GT3 y su hipotético salto a los motores turboalimentados, pero lo cierto es que en Porsche, al menos de momento, aún no se plantean que el motor bóxer de este producto de precisión enfocado a los más puristas deje de ser atmosférico.
Así lo ha afirmado a la publicación australiana Drive el responsable de modelos GT de calle y competición de Porsche, Dr. Frank-Steffen Walliser, quien ha asegurado a sus clientes que el 911 GT3 seguirá ofreciendo un motor atmosférico y también una caja de cambios manual, durante tanto tiempo como el propio mercado y la legislación lo permitan.
"Un motor de aspiración atmosférica sigue encajando en nuestro deportivo. No puedes conseguir lo mismo con un motor turbo, y en los planes de Porsche no se contempla que toda la gama recurra a la turboalimentación, al menos durante tanto tiempo como nos sea posible", aseguraba Walliser.
De esta manera es Porsche quien acaba de un plumazo con los rumores sobre el próximo GT3, que decían optaría por un motor turboalimentado en lugar del actual 4.0 litros bóxer atmosférico de seis cilindros y 500 CV. En cualquier caso, para descubrir qué nos tiene preparado Porsche con respecto a su todopoderoso GT3, habrá que esperar a su lanzamiento.
Un repaso técnico al actual GT3
El actual Porsche 911 GT3 mostrado a principios del año pasado ofrece, para alegría de los clientes más puristas, una caja de cambios manual que, además, es la compañera perfecta para el motor bóxer de 4 litros -derivado de los de competición-, con 500 CV a 8.250 rpm, 460 Nm a 6.000 vueltas y capaz de subir nada menos que hasta las 9.000 rpm.
Como buen deportivo está fabricado con materiales ligeros e incorpora soluciones como un eje trasero direccional que aporta agilidad, un diferencial autoblocante mecánico en el tren posterior, soportes activos del motor, una trabajada aerodinámica -incluido el característico alerón trasero-, equipo de frenos de altas prestaciones, llantas monotuerca o asientos baquet de fibra de carbono. Por supuesto, no busques asientos traseros, porque no los vas a encontrar.
En el caso de equipar la caja de cambios PDK de doble embrague acelera de 0 a 100 km/h en 3,4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 318 km/h, mientra que con la caja manual es un poco más lento en aceleración, con una marca de 3,8 segundos en el 0-100 km/h, pero tiene una velocidad punta ligeramente superior, de 320 km/h.