Opel estrenará motor en el Astra, un 1.4 de cuatro cilindros turboalimentado y con inyección directa de gasolina que desarrollará hasta 150 CV de potencia. Lo presentará en el Salón de Frankfurt (en septiembre). Peso, vibraciones y ruido han sido tres puntos importantes en el desarrollo de este propulsor cargado de tecnología.
Opel anuncia una buena respuesta, altas prestaciones y consumos reducidos para este motor. Ahora queda por ver que no lo maten con unos desarrollos larguísimos y coches excesivamente pesados. Desarrolla un par máximo de 245 Nm desde un régimen muy bajo para ser gasolina, de 2.000 a 4.000 rpm y habrá dos versiones, en 125 y 150 CV de potencia.
Según las pruebas previas el consumo medio se cifra en 4,9 litros a los cien kilómetros. Respecto a la rumorosidad mecánica comentada antes este propulsor cuenta con un bloque en el que se ha tenido en cuenta durante su diseño reducir la resonancia, el cárter de aceite está dividido en dos partes, la unión del colector de escape con la culata está aislada y tiene una cadena de distribución más corta.
El bloque es de aluminio y pesa 10 kilos menos que el de acero del 1.4 turbo actual, además el cigüeñal es hueco para arañar más gramos. Cuenta con bomba de aceite de baja fricción con dos niveles de flujo y trabaja con aceites de baja viscosidad (menor fricción).
