Personalmente siempre me han gustado las marcas que en ocasiones tratan de salirse de lo convencional, de lo que saben que funciona y buscan una línea diferente. Y Mazda creo que es una de las marcas que siguen esta estrategia de romper con lo normal para ser “diferentes”.
Lo hicieron en su momento cuando se atrevieron a comprar la patente del motor rotativo a General Motors para desarrollarlo. Con la evolución de ese motor ganaron las 24 Horas de Le Mans con el espectacular 787B pilotado por Volker Weidler, Johnny Herbert y Bertrand Gachot por delante de marcas como Jaguar, Mercedes, Peugeot y Porsche.
Pero ahí no se acaba la apuesta por la innovación y las ideas revolucionarias en Mazda. Hace algunas semanas la marca de Hiroshima nos juntó a un grupo de bloggers en sus oficinas de Madrid, para contarnos por dónde irá el futuro de sus modelos, que a partir de 2012 comenzarán a incorporar una serie de soluciones técnicas englobadas bajo el concepto Skyactiv.
Si te gusta la técnica, sigue leyendo porque algunos de los conceptos que teníamos como inamovibles, pueden comenzar a cambiar a partir de ahora…
El concepto Skyactiv
Dentro del concepto Skyactiv de Mazda, se engloban diferentes innovaciones que se aplicarán a los modelos de la próxima generación de Mazda, comenzando con el nuevo SUV medio CX-5 que se presentará en el Salón de Fráncfort.
El Mazda CX-5 será el primer todocamino compacto de la marca japonesa, con motores de gasolina o diesel y cajas de cambios manuales o automáticas. La versión menos potente tendrá 150 caballos de potencia.
Estas innovaciones englobadas bajo el nombre Skyactiv se aplican a motores, transmisiones, carrocerías y chasis, con el objetivo de hacer los coches más eficientes y eficaces, mediante una serie de soluciones que hasta a los propios ingenieros les costará creer. Mazda ha conseguido reducir sus consumos un 19% entre 2001 y 2008, y se ha fijado como objetivo bajar un 25% más los consumos y las emisiones de CO2 de aquí a 2015. ¿Cómo lo conseguirán?
Los motores Skyactiv
Bajo el nombre Skyactiv-G se encuentran los futuros motores de gasolina. Un primer dato importante, es que han conseguido una relación de compresión 14:1, la mayor de todas las disponibles en un motor de gasolina de un vehículo de calle.
Se ha incorporado un sistema de escape 4-2-1 entre otras cosas para evitar que se produzca el efecto conocido como “autoencendido”. Cuando la temperatura y la presión son excesivas, la mezcla se puede encender prematuramente. El sistema de escape 4-2-1 con una salida más larga del bloque, impide que los gases de escape que salen del cilindro vuelvan al interior de la cámara de combustión. Así se reduce la temperatura de compresión y se evita el “autoencendido”.
Por otro lado se ha reducido la fricción interna del motor un 30% y el peso total del conjunto un 10%. En cuanto al consumo de combustible y las emisiones de CO2 se reducen un 15% respecto a los motores de gasolina actuales, mientras que el par motor aumenta también un 15% en bajas y medias revoluciones.
Los pistones, se parecen más a los de una moto que a los de un coche. ¿Porqué? Pues porque para conseguir esta evolución tienen un menor diámetro y una mayor carrera, lo cual permite alcanzar esa relación de compresión de 14:1 tan llamativa y extraña en un motor de gasolina.
Los motores diesel también tienen novedades importantes, engobadas bajo el nombre de Skyactiv-D. Con una relación de compresión también de 14:1, los motores diesel de nueva generación consumirán un 20% menos respecto al actual 2.2 diesel de Mazda.
Incorporarán un turbocompresor de dos etapas que asegurará respuesta y contundencia desde bajas a altas revoluciones, llegando a alcanzar las 5.200 RPM. Las fricciones internas se reducen un 20%, y el peso del conjunto un 10%.
Las transmisiones Skyactiv de Mazda
Con las innovaciones Skyactiv, también las transmisiones manuales y automáticas reciben novedades. Por un lado la automática Skyactive-Drive, está disponible tanto para los motores de gasolina como para los diesel. Según Mazda, y a falta de poder probarlo personalmente para emitir un juicio de valor, es una mezcla entre una caja continuamente variable (CVT), la transmisión de doble embrague y la transmisión automática convencional.
También aseguran que la respuesta es más suave y a la vez rápida cuando arrancamos desde parado, y permite reducir los consumos en un 7%. Estará disponible por el momento con seis velocidades, y no nos han hablado de la posibilidad de incorporar más marchas para reducir los consumos más si cabe al alargar las relaciones.
Por otro lado, la caja de cambios manual Skyactiv-MT (de Manual Transmission) también tiene seis marchas, y al desarrollarla el objetivo era conseguir una caja rápida y precisa, con un tacto que recordase a la caja del Mazda MX-5. La caja es más compacta y ligera, ayudando así a reducir el peso del conjunto sin sacrificar por ello ese buen tacto del que hablamos. También las fricciones internas se reducen.
La carrocería Skyactiv-Body
Conseguir construir una carrocería que sea más ligera y al mismo tiempo más robusta, puede parecer contradictorio. Pero lo cierto es que desde Mazda aseguran que han conseguido reducir un 8% el peso, gracias al empleo de nuevos aceros de alta resistencia, nuevos procesos de producción y una estructura renovada.
Por otro lado la rigidez del conjunto mejora ni más ni menos que un 30%, gracias a un nuevo diseño de los componentes del bastidor, tanto lo que se considera los “bastidores” del chasis como los anillos que dan forma a la carrocería.
Chasis Skyactiv
Y por último, dentro del concepto Skyactiv que comenzarán a incorporar todos los Mazda a partir del próximo CX-5, también hay novedades importantes en cuanto a los chasis. Si alguna vez habéis probado un Mazda, sabréis que la puesta a punto de sus chasis hace que la sensación de agilidad y dinamismo en la conducción sea muy alta, ya sea al volante de un Mazda 5 o de un MX-5.
Pues precisamente en los coches Skyactiv de Mazda se ha trabajado para rediseñar por completo los puntos de montaje de la suspensión trasera, la posición del brazo de arrastre, los componentes de la dirección y la puesta a punto en general del chasis, con el objetivo de seguir manteniendo esta sensación de agilidad y ligereza, al mismo tiempo que se consigue mayor rigidez del conjunto.
Los chasis de los Skyactiv serán más rígidos, y en torno a un 14% más ligeros gracias a una suspensión completamente nueva con barras en el eje delantero y multibrazo en el trasero.
¿Qué busca Mazda con el desarrollo de Skyactiv
Tal vez después de leer todas las novedades que incorporaran los Mazda a partir del CX-5 que se presentará en el Salón de Franckfort y comenzará a venderse en 2012, no tengáis del todo claro cual es el objetivo de unir todas estas novedades bajo un mismo paraguas.
Según Mazda, en el año 2020 el 80% de los vehículos que circulen en el mundo serán de combustión interna o lo que es lo mismo, completamente diesel o completamente de gasolina. Por ello, sin dejar de lado los híbridos y eléctricos (en 2012 se venderá un Mazda2 completamente eléctrico en una edición limitada para Japón), se han propuesto dar un último apretón a los coches que ocuparán el grueso de ventas de sus concesiones en los próximos años.
De aquí a 2015 el objetivo de Mazda es reducir las emisiones y consumos en un 25%, y seguirán con ese objetivo al mismo tiempo que sus coches serán más ligeros y por tanto ágiles y divertidos de conducir. ¿Alguien duda por tanto que no hay todavía mucho por mejorar en el mundo de los coches de gasolina y diesel?
En Mazda es evidente que no lo dudan, y apuestan por ello. Esperemos a probar el nuevo Mazda CX-5 y os contaremos como se transmiten estas innovaciones al conductor.
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