Mazda i-stop es la denominación de Mazda para su sistema de detención de motor en los semáforos (stop&start). Por el momento se puede equipar únicamente en el Mazda3 con el motor 2.0 DISI (gasolina), con el que consigue una reducción de consumo del 14%.
Es una cifra muy alta, si bien es cierto que en un motor más grande se puede notar más el efecto. Pero además de esto, Mazda afirma que su sistema i-stop es mejor respecto al de sus competidores, ya que utiliza energía de combustión para arrancar el vehículo.
Concretamente se utiliza una combinación de inyección directa, apertura de válvulas y posicionamiento del pistón y una pequeña ayuda del motor de arranque para volver a arrancarlo, lo cual deriva, según la marca, en que el motor se arranca de nuevo casi el doble de rápido que otros modelos de la competencia.
Junto al sistema i-stop también se ha presentado el Mazda CX-7 y el Mazda3 MPS, modelos de los que hablaremos en los próximos días.
Fuente | Mazda